“Marruecos aprecia altamente las posiciones positivas y los compromisos constructivos de España sobre la cuestión del Sáhara marroquí”, así se lo hace saber el Presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, al rey Mohamed VI.

Por otro lado, el Reino de Marruecos aprecia la posición y el compromiso de España sobre la cuestión del Sáhara marroquí.

El mensaje permite prever una hoja de ruta clara, ambiciosa, duradera y bilateral, unas bases que se destacaron en el discurso del rey alauita a "inaugurar una nueva etapa inédita en las relaciones entre los dos países, sobre la base de la confianza, la transparencia, el respeto mutuo y la honra de los compromisos". 

España y Marruecos lanzaban sendos comunicados donde el Gobierno español, refería que se iniciaba una nueva etapa en la relación con Marruecos basada en el respeto mutuo, el cumplimiento de los acuerdos, la ausencia de acciones unilaterales y la transparencia y comunicación permanente.

Esta nueva etapa se desarrollará, tal y como indican los comunicados del Gobierno de Marruecos, en una hoja de ruta clara y ambiciosa. Todo ello para garantizar la estabilidad, la soberanía, la integridad territorial y la prosperidad de los dos países.

Los reinos afrontaran juntos los desafíos comunes, especialmente la inmigración tanto en el Mediterráneo como en el Atlántico, y se restablecerá la plena normalidad en la circulación de personas y bienes, en beneficio de ambos pueblos.

El Gobierno acoge con satisfacción el viaje Sánchez a Rabat, para desarrollar la hoja de ruta de esta nueva etapa, así como la invitación para que el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, visite Rabat antes de final de mes, el cual, ha afirmado este viernes que, España considera que la iniciativa de autonomía marroquí para el Sahara presentada en 2007 es "la base más seria, realista y creíble" para la "resolución" del conflicto.

La iniciativa presentada es que marruecos, otorgara cierta autonomía al territorio, pero siempre que forme parte de Marruecos, lo que no contempla y cierra todas las puertas es a la independencia del Sahara Occidental.

Todo llega después de la invasión rusa donde se reconoce la soberanía de Ucrania y la de esta sobre sobre los territorios anexionados por Rusia (Crimea), o los que buscan una autodeterminación como el Dombas.

Que pasara con Argelia, pues dependemos de ella por el gas, pues según Albares nada, porque “Argel es un socio fiable”. Y con la autodenominada RASD o República Saharaui, cuyo líder Braim Gali es socio del gobierno argelino.

Pues bien, el delegado del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, ha pedido al Gobierno de España que, “actúe en consecuencia y rectifique asumiendo la responsabilidad que tiene con el pueblo saharaui".

Arabi pide al Ejecutivo español "responder a la solidaridad” y a lo que reclama la sociedad española que “es solidaria con el pueblo saharaui” la cual señala que “no comprende ni entiende que su Gobierno, de repente, haya abandonado la vía de la legalidad internacional”, además añade refiriéndose al Ejecutivo español que “trabaja para los intereses de la potencia ocupante, Marruecos".

Por otro lado, el delegado del Polisario en Canarias, Hamdi Mansour, ha recriminado a Sánchez, de haber utilizado al pueblo saharaui como "moneda de cambio" para retomar "las dañadas relaciones políticas y diplomáticas" entre España y Marruecos.

También Mansour, ha reprochado que España respalde el Plan de autonomía marroquí “como opción más realista para resolver el problema del Sahara”, y afea "la hipocresía" del Gobierno cuando” habla de legalidad internacional”.

La Asociación Amigos del Pueblo Saharaui del Campo de Gibraltar Solidaridad, muestra su más enérgica repulsa y total rechazo hacia el Gobierno español por su nuevo posicionamiento favorable a la propuesta marroquí en el conflicto del Sáhara.

Asimismo, el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha asegurado que su partido no respaldará ninguna propuesta que no sea la de “respetar la libre decisión del pueblo saharaui".

Por otro lado, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha advertido de los "perjuicios" que puede suponer para España el "volantazo" del Gobierno sobre el Sahara Occidental y ha dejado claro que no admitirá "ninguna ambigüedad" con relación a la soberanía española de Ceuta y Melilla.

Al contrario que su homologo, el presidente del Gobierno de la Ciudad, Juan Vivas, valora de manera positiva la nueva etapa que se apertura en las relaciones con Marruecos para garantizar “la estabilidad, la soberanía, la integridad territorial y la prosperidad de nuestros dos países”. Una valoración que ha comunicado telefónicamente al ministro Albares.