Mientras un ciento de personas se han manifestado en una caravana por la ciudad, bajo el lema 'Nuestro rezo no se negocia' exigiendo a la autoridad delegada que derogue el decreto del toque de queda a las diez de la noche, el cual impediría celebrar los dos últimos rezos diarios de Isha y Tarawih en las mezquitas durante la primera quincena del mes de Ramadán, a pesar de haber sido justificada por el presidente, Juan Vivas, debido al incremento al alza de la incidencia acumulada, la Delegación de la Comisión Islámica de España en Ceuta comprende el adelanto del toque de queda, basándose como prioridad la salud,  ya que para la Delegación el  salvaguardarla “es un acto de fe".

El Gobierno dependiendo de la situación epidemiológica y si la presión hospitalaria es favorable se revisara en el próximo decreto.

El partido político nacional Podemos y Unidas Podemos en Ceuta y otros locales como el MDyC han cuestionado el toque de queda, para que se mantuviese como la Semana Santa y los dos días señalados del Ramadán trasladarlo a la una, al igual como se hizo en la Navidad. Asimismo, también el PSOE, está por la labor de ampliarlo hasta la medianoche, siempre que la situación mejore.

El partido nacional Contigo Somos Democracia, su responsable de Extensión, José Carbonell no da crédito a tanto despropósito, por ello lamenta que:

“La comunidad musulmana pide poder celebrar su mes sagrado y se les está poniendo trabas. Se les dice que el Ramadán no puede llevarse a cabo en las mezquitas por seguridad y por salud”.

Pero el otro partido localista que más ha luchado para restringir y endurecer las medidas ha sido Caballas el cual manifiesta que, Ceuta podría haber sido ejemplo en la contención del virus, es hoy la región con la incidencia acumulada más alta de España. Su portavoz Mohamed Ali lo achaca a la mala gestión en Navidad y ahora a la Semana Blanca y Semana Santa, por los datos escalofriantes.

Ali tiene claro que:

“Este Gobierno ha desoído las recomendaciones de Medicina Preventiva, y se rechazaba las advertencias que le hacíamos desde Caballas. Ellos, y el resto de partidos. El resultado: una cuarta ola que puede ser brutal”.