La Ciudad ha preparado un dispositivo especial de seguridad en el Cementerio de Santa Catalina con el fin de asegurar el cumplimiento de las medidas sanitarias y restrictivas a los ceutís que visitaran a sus seres queridos fallecidos, los cuales limpiaban sus nichos, los ornamentaran con flores, y en algunos casos los alumbraban, finalizando con una oración en el Día de Todos los Santos y el Día de los Fieles Difuntos, día en el que la COMGECEU honrara a sus muertos.

De acuerdo a las directrices sanitarias, en el Cementerio se han establecido cinco puntos de acceso para evitar aglomeraciones.

En todo momento, se deberá hacer uso de la mascarilla, asimismo también se ha determinado la toma de temperatura a todos los visitantes quienes deberán de mantener la debida distancia de seguridad interpersonal de al menos 1,5 metros.

Encarecidamente el Gobierno de la Ciudad recomienda, en cualquier caso, que no acudan grupos integrados por más de tres personas con el propósito de evitar contagiarse con el virus.

Día de Todos los Santos 

El 1 de noviembre es el Día de Todos los Santos para la Iglesia Católica y el primer domingo de Pentecostés para la Ortodoxa, en el que se celebra la liberación de las almas de los difuntos que han superado el Purgatorio por haberse santificado totalmente y gozaran felizmente de la vida eterna en presencia de Dios. Por ello la Iglesia se manifiesta sobre las cremaciones, no viendo razones doctrinales para prohibirlas, pero las cenizas deben de mantenerse en un lugar sagrado.  

Día de los Fieles Difuntos

El 2 de noviembre es el día de la Conmemoración a los Fieles Difuntos, conocido como Día de los Muertos o Día de los Difuntos o Día de las ánimas, o Día de Todos los Muertos, un día complementario al Día de Todos los Santos.

En este día se celebra rezando en recuerdo a las personas que han finalizado su vida en el mundo de los vivos, pero especialmente orando por los que su alma se encuentra vagando por la tierra –Purgatorio- sin encontrar un lugar de reposo, es un estado transitorio de purificación antes de alcanzar el Cielo.