El jueves, día 19, se llevó a cabo el encendido de las luces en la Sinagoga para, posteriormente, trasladarse a la plaza Nelson Mandela, en donde tuvo lugar un acto organizado por la comunidad judía, el cual estuvo dedicado a los mayores. A este acto también asistió el presidente de la Ciudad.

Según fuentes de la Ciudad, este año el alumbrado ornamental de la Janucá está compuesto por un total de 28.365 (todos de bajo consumo) repartidos entre las calles Sargento Coriat y Beatriz de Silva.

Como sabemos, la festividad de Januká conmemora un milagro. Tras la reconquista del Templo Sagrado de Jerusalém por parte de los macabeos, que había sido profanado por los griegos, los sacerdotes encuentran una pequeña vasija sellada con aceite consagrado en su interior, aceite destinado a mantener encendida la llama eterna. Contenía la cantidad de aceite que solo debía durar 1 día. El milagro se produjo: la llama se mantuvo encendida durante 8 días, tiempo que se tardaba en elaborar y consagrar un nuevo aceite.