A las tres de la mañana en el Regional Wellington, ante más de 32.000 espectadores, comenzaba el choque entre las selecciones femeninas de España como local y Países Bajos.

Un partido serio, con dos equipos muy disciplinados, iniciando jugadas desde atrás, luchando por la posesión, y una España muy férrea en defensa. Las neerlandesas, muy peligrosas, mucha calidad y olfato de gol. Pero no pudieron con las españolas que imprimieron rapidez por las bandas.

Dos balones de la pontevedresa, Alba Redondo, que besaron el palo, un gol bien anulado por el VAR por fuera de juego de la granadina, Esther, tras un pase de Redondo, y una mano inexistente de Van Domselaar, para la colegiada francesa, Stephanie Frappart, fueron los dominantes que marcaron el primer tiempo.

Tras el descanso, un penalti que el VAR no decreto a España por carga legal de Paredes sobre Beerensteyn. Un cruce desde la línea de fondo de la zaragozana Salma lo corta con la mano Van Der Gragt, la trencilla Frappart pita penalti, Mariona desde los once metros, en el minuto 80’, transformó la pena máxima engañando a la portera neerlandesa por su derecha, la pelota da en la cepa y entra (1-0).

Corrían el primer minuto de los doce añadidos, en el +91, cuando Van Der Gragt recibe un pase en profundidad desde la banda derecha, se enfila hacia el área disparando cruzado al palo largo de la española Cata Coll, emendando así su anterior error (1-1).

Nederland conseguía empatar la contienda, pero aún quedaban once minutos, cuando Salma Paralluelo a dos del final, en el 110’, recibe una bola en profundidad de Jenni, la joven jugadora de 19 años y también atleta, la que, se da una gran galopada entra en el área, regatea, dispara cruzado pegando el cuero en la cepa del segundo palo de Van Domselaar (2-1).

Las de Vilda besaron los postes, ganaron y le concedieron una victoria histórica a España contra las de Jonker.