22 de octubre: “Los Santos Inocentes”, la obra llevada al cine y ahora en el teatro
Cultura pone sobre las tablas del Teatro del Revellín la adaptación de Fernando Marías y Rafael Hernández de la obra de Miguel Delibes “Los Santos Inocentes”, llevada a escena por Javier Hernández-Simón.
La obra se pondrá en escena el próximo 22 de octubre a las 19.30 horas. Las localidades tendrán un precio entre 16 y 7 euros, con descuento de 2 euros para los colectivos habituales. Las entradas se venderán en la web www.ceuta.es y en taquilla.
GG Producción e coproducción con otras productoras, tienen el reto llevar al teatro una obra que todavía tenemos en la mente la película de Mario Camus, con un elenco de primera categoría de actores como Paco Rabal (Azarías), Juan Diego (señorito Iván), Alfredo Landa (Paco el Bajo), Agustín González (don Pedro) y las actrices Terele Pavez (Régula), Mary Carrillo (marquesa)y Ágata Lys, hoy todos ellos fallecidos y Manuel Zarzo (don Manuel), entre otros más jóvenes.
Pues bien, esta novela es una de las grandes del siglo XX y su envergadura se agiganta ante el reto de transformarla en texto teatral que nadie se había atrevido hasta ahora, la cual, también la defienden grandes actores, como Luis Bermejo (Azarías), Javier Gutiérrez (Paco el Bajo), Jacobo Dicenta (señorito Iván), Pepa Pedroche (Régula) y Yune Nogueiras (Nieves), entre otros personajes.
De la España profunda de los atavismos a la de hoy
No vamos a desgranar los personajes extraordinarios que surgen de una mirada lúcida e inmisericorde sobre la España de una época. La obra está ambientada en la Extremadura de los años sesenta del pasado siglo.
Delibes, que dedico esta novela a Félix Rodríguez de la Fuente, gestó su obra a raíz de sus incursiones cinegéticas (el arte de la caza) en la zona y denunció con ella las injusticias sociales, el analfabetismo, el desigual reparto de la tierra, la deshumanización y el brutal sometimiento de las clases menos pudientes. Es también mirada sobre el ser humano, sobre el mundo y, sin duda lo principal, sobre la España de hoy.
El malogrado, Fernando Marías decía que, Delibes advertía que esas circunstancias y esos personajes nunca se acabaron de ir, siguen estando ahí, aunque sea con otras formas, aguardando la oportunidad de retornar con nueva fuerza, Azarías, héroe anómalo; Régula, el corazón; Nieves, esperanza y dignidad; Iván, la maldad impune y Paco el resignado, pero es el personaje que más nos concierne. Paco, el Bajo es la pregunta y cada uno de nosotros la respuesta.
La adaptación se centra en los diálogos fuera de narraciones. Las escenas atrapan al espectador aquellas donde los ricos humillan a sus sirvientes, pero sin darse cuenta de ello, porque todo parece natural, todo se resuelve con la frase: “A mandar, que para eso estamos”.
Decía Albert Camus que:
“La única manera de lidiar con un mundo sin libertad es llegar a ser tan absolutamente libre que tú misma existencia es un acto de rebelión”.