La Guardia Civil de Ceuta ha interceptado el 7 de marzo, sobre las ocho de la mañana, en el puerto una furgoneta, cuando intentaba embarcar en el ferry con destino a Algeciras que transportaba 900 kilos de resina de hachís.

Durante un control rutinario, agentes de la Fiscal y de Fronteras, junto con el Grupo Cinológico, detectaron irregularidades en el logotipo rotulado de la furgoneta, lo que levantó sospechas por no corresponder con ninguna empresa real, simulándose en apariencia con otra existente.

Tras una inspección más detallada, se descubrió un doble fondo en la parte superior del vehículo, donde estaba oculta la droga.

El conductor, un hombre español de 53 años y residente en la provincia de Cádiz, fue detenido y puesto a disposición judicial como presunto autor de un delito contra la salud pública.

La intervención refuerza la presión sobre el tráfico de drogas en la ciudad y evita que una gran cantidad de hachís llegue a su destino.