El Gobierno de España, entre los años 2019 y 2020, ha tramitado un total de 80.747 solicitudes de reagrupación familiar en nuestro país. En concreto, 47.160 en el año 2019, y 33.587 en el año 2020. Se trata de un procedimiento de extranjería mediante el cual, un ciudadano con permiso de residencia puede traer a su familiar a España.

El Ejecutivo, hasta el 31 de octubre, ha informado que Marruecos es el país que más tramitaciones de reagrupación familiar se han concedido, en total, 21.808 en 2019, de los cuales 5.117 no fueron concedidas, y 15.893 en 2020, de las cuales 5.098 fueron denegadas. Cabe destacar que el segundo país con el mayor número de solicitudes aprobadas es Pakistán, un total de 8.569. Y el tercer país es China, con más de 3.000 solicitudes tramitadas.

El Gobierno asegura que, “no cumplir con los requisitos establecidos”, es el motivo mayor de causas de no concesión, un total de 2.621, seguido de insuficientes medios económicos, y falta de aportación de documentos, son las causas mayores, lo que hace un total de 20.281 los motivos de no concesión.

La parlamentaria ceutí, Teresa López señala que estos datos facilitados por el Gobierno a petición de su formación, muestran que la política de este Gobierno es la de flexibilizar la legislación en extranjería, ya que el Gobierno, en otras ocasiones, les respondía que:

“Los retos inmediatos en inmigración pasaban por flexibilizar el régimen de autorizaciones de la inmigración, la ley de Extranjería. Lo que lamentamos y seguiremos denunciando, ya que no podemos olvidar la invasión migratoria sufrida durante 2020, especialmente en Canarias, donde los datos hablan de un crecimiento del 1.000% con 18.000 entradas ilegales”.

Para el presidente de VOX Ceuta, Juan Sergio Redondo, “esto es una prueba más de la política de puertas abiertas que en materia migratoria lleva a cabo el Gobierno” y añade que:

“Viene siendo consentida en nuestra ciudad por el Gobierno de Juan Vivas y el Partido Popular desde hace años. Una política que acarrea nefastas consecuencias para Ceuta, ciudad especialmente sensible a estos procesos de inmigración ilegal, provocando con ello, que MENAs e inmigrantes de origen argelino y marroquí campen libremente a sus anchas, poniendo en serio riesgo la seguridad y colapsando nuestros servicios asistenciales”.