Alto el fuego acordado entre Israel y la Yihad Islámica Palestina, mediado por Egipto, entró en vigor el domingo, esperando que frene una sangrienta escalada de violencia de tres días, que se ha saldado al menos con 44 muertos palestinos, entre los que había 15 niños y cuatro mujeres. También hay 360 heridos del lado palestino y 20 por los israelitas. Fallos en la deriva y alcance de los cohetes de la YIP, batieron objetivos propios, causando muertes.

En estas tres jornadas de hostilidades, la Yihad Islámica Palestina (YIP), exactamente las Brigadas Al Quds, el brazo armado de Yihad Islámica, ha lanzado más de 160 proyectiles contra ciudades israelíes próximas a la Franja y lanzaron más de 930 cohetes desde Gaza hacia Israel.

La Yihad Islámica, con mil milicianos posee un arsenal de unos 5.000 cohetes y según varias fuentes, "está estrechamente ligada a Irán, mientras Hamás mantiene una alianza estratégica con Qatar, su principal apoyo regional". 

La Yihad Islámica Palestina es un movimiento yihadista considerado terrorista por Estados Unidos, la Unión Europea, ​ Reino Unido, ​ Japón, ​ Canadá, ​ Australia​ e Israel. Su principal objetivo es la destrucción de Israel y su reemplazo por un Estado Islámico en Palestina. ​

Pues bien, ahora que ya hemos puesto en antecedentes a los lectores, Ceuta Ya!, condena de los bombardeos que, en los últimos días, el estado de Israel ha llevado a cabo sobre población civil palestina en la franja de Gaza.

También, la formación local considera “imprescindible” que el Gobierno Central de Pedro Sánchez articule los mecanismos internacionales necesarios para poner fin a “una barbarie que se produce con total impunidad y ante el silencio atronador de la Comunidad Internacional”.

Y es que, en opinión del líder localista, Mohamed Mustafa, al igual que ocurrió con el caso sudafricano, cree que:

“La presión internacional es fundamental para terminar con el apartheid, reconocido por la propia Organización de Naciones Unidas, que sufre la población palestina”.

Finaliza el partido progresista aludiendo que:

“El compromiso con la democracia y los derechos humanos no puede quedarse en las invasiones e injusticias que ocurren en Europa”.