La fragata ‘Reina Sofía’ ha regresado a la Base Naval de Rota tras su participación en la Operación ‘Atalanta’ de la Unión Europea. Desde su partida el día 2 de octubre, ha permanecido 149 días fuera de base, 124 de los cuales integrada en la citada Operación.

Finaliza así su segunda participación en esta Operación que forma parte del compromiso adquirido por España desde 2008, bajo bandera de la Unión Europea, en su lucha por mantener la seguridad en las aguas del Golfo de Adén y Somalia, protegiendo a los barcos del Programa Mundial de Alimentos, a los barcos de la misión de la ONU para Somalia (AMISOM) y manteniendo la seguridad del tráfico marítimo vulnerable.

Durante este periodo de tiempo, la fragata española ha navegado 25.000 millas náuticas, el equivalente aproximado a una vuelta al mundo, ha realizado más de doscientas aproximaciones amistosas a pesqueros, ha volado 475 horas con sus medios aéreos y ha realizado dos escoltas a buques mercantes del Programa Mundial de Alimentos (WFP). Además, desde el 2 de diciembre, fue el buque de mando de la agrupación.

Al mando del capitán de fragata Pedro Cardona Suanzes, la fragata ha contado con un máximo de 226 personas a bordo. Además de su dotación, participaron en el despliegue un Equipo de Operaciones Especiales, que fue relevado a mitad de misión por un Equipo Operativo de Seguridad Tercio Sur, una Unidad Aérea Embarcada de la 3ª Escuadrilla de Aeronaves y otra de la 11ª Escuadrilla.

Dada la alerta internacional ante la pandemia de la COVID-19 la dotación y fuerzas embarcadas de la ‘Reina Sofía’ han tenido que permanecer a bordo durante los cinco meses que ha durado esta operación para garantizar la burbuja libre COVID. Esto ha supuesto un esfuerzo extra para la dotación que si bien ha realizado un trabajo excepcional en una demostración de resiliencia. La preparación durante su alistamiento y la observancia de las medidas sanitarias durante el despliegue han permitido el normal cumplimiento de su misión.

Acerca de la fragata Reina Sofía

La fragata es la cuarta de las seis que componen la clase “Santa María”, con las que forma la 41 escuadrilla de escoltas y tiene su base en Rota. La 41 Escuadrilla constituye una parte fundamental de la capacidad de protección de la Armada y su principal misión es la protección de grupos de combate o grupos anfibios. Inicialmente los buques fueron concebidos para misiones eminentemente antisubmarinas y para operaciones de escolta oceánica, no obstante los cambios experimentados en el entorno estratégico han hecho que los buques, dada su gran versatilidad y variedad de capacidades, en la actualidad puedan emplearse en otros cometidos, tales como apoyo en la proyección de una Fuerza Naval, protección al tráfico, operaciones de interdicción marítima, integración en la defensa aérea territorial, y vigilancia y escolta en teatros de operaciones alejados.

La fragata “Reina Sofía” celebró su trigésimo cumpleaños durante el transcurso de la operación (fue entregada a la Armada el 30 de octubre de 1990) y las segundas Navidades fuera de su base en los últimos tres años.