Cruz Roja multiplica por 15 las intervenciones de albergue provisional
Los ERIE despliegan sus recursos en un máximo de 12 horas, para reforzar la atención de emergencias en el ámbito local se han creado los ERBE.
Actuar para superar las situaciones que ponen peligro la vida de las personas es el leitmotiv del área de Socorros de Cruz Roja; se ponen en marcha planes para reducir el riesgo de exposición ante desastres naturales u otras situaciones de emergencia, y facilitar un acceso más rápido a la asistencia. En este sentido, el compromiso de Cruz Roja es adaptarse a las distintas situaciones, como parte del sistema de emergencias y protección civil, desarrollar mecanismos de alerta temprana y recomendaciones, y promover una asistencia rápida y de calidad que garantice la cadena de socorro.
De este modo, Cruz Roja atiende a personas migrantes que llegan a las costas, a mujeres víctimas de la violencia machista, a personas con discapacidad que a través del baño adaptado -con equipamiento y personal especializado-, pueden disfrutar el verano con seguridad, o a cualquier ciudadano o ciudadana que se encuentre en un lugar en el que puede existir un riesgo previsible (como un evento multitudinario, o el medio acuático).
Bajo estas premisas, Cruz Roja atendió en 2020 a 300.000 personas, gracias a más de 71.000 personas voluntarias en todo el territorio; sólo en emergencias fueron más de 137.00 personas, mientras que en playas y otros preventivos acuáticos las cifra ascendió hasta las 51.000 personas; la ayuda también llegó a través del transporte sociosanitario hasta las 43.000 personas, mientras que 20.000 fueron atendidas en actos deportivos, culturales o festivos, y 1.124 en el mar.
Uno de los mayores retos afrontados por Cruz Roja en 2020 ha sido la respuesta a las necesidades surgidas por la COVID-19; a través de Cruz Roja RESPONDE, el área de Socorros registró el mayor número de intervenciones durante la ‘primera ola’: desde el primer momento se activó en todo el territorio nacional la actividad de respuesta, para lo que se creó un célula de gestión operativa que dio apoyo y seguimiento nacional, y adaptó la atención a los recursos y necesidades del lugar y el momento.
En este sentido, el apoyo a colectivos como las personas sin hogar hizo que se incrementaran las intervenciones de los Equipos de Respuesta Inmediatas de Albergue Provisional hasta en un 1.500%, “pusimos a disposición de quienes lo necesitara más de 5.800 plazas de alojamiento para que las personas sin domicilio pudieran realizar el confinamiento”, señala Íñigo Vila, jefe de la Unidad de Emergencias de Cruz Roja. Del mismo modo, se realizaron más de 21.000 traslados urgentes de personas afectados, y se atendieron a 360.000 personas dado apoyo en la toma de muestras. La Unidad de Emergencias también entrego bienes básicos a domicilio “cifras inimaginables a inicios de año: 850.000 productos, entre los que se incluyen equipos de protección individual, medicamentos, productos básicos de higiene y alimentación”.
Como apoyo al sistema sanitario, se instalaron más de 30 infraestructuras hospitalarias temporales, y la actividad de la ERIE de Atención Psicosocial incrementó en un 300% su actividad con respecto al año anterior, destacando la atención del propio personal interviniente durante la primera fase de la emergencia. En total, la atención de más de 1.200.000 personas y 2.368.000 respuestas se gestionaron desde el área de conocimiento de Socorros durante la pandemia
Equipo de Respuesta Básica en Emergencias de Cruz Roja
Si bien una parte muy significativa de la actividad de los Equipos de Respuesta Inmediata en Emergencias (ERIE) de Cruz Roja se vio afectada por la pandemia de la COVID-19, durante el pasado año otras situaciones sobrevenidas como las DANAs, incendios o accidentes requirieron del despliegue de los ERIEs de Cruz Roja. Cerca de 3.000 intervenciones sirvieron para atender a 138.000 personas en situaciones de emergencia, ya sea para darles alojamiento provisional, apoyo psicosocial, facilitándoles las comunicaciones, o por su búsqueda y rescate en el medio acuático o terrestre.
Los ERIEs de Cruz Roja atienden las necesidades de las víctimas de una emergencia con una respuesta especializada; se dan primeros auxilios físicos y psicológicos, se trabaja en la búsqueda de personas desaparecidas, se colabora en la limpieza de viviendas en inundaciones y se distribuyen productos de primera necesidad. El voluntariado perteneciente a estos equipos cumple con un perfil curricular y profesional especializado en ámbitos como la sanidad o la atención social, entre otros.
Actualmente, Cruz Roja cuenta con 38 territorios con equipos de Albergue Provisional, 17 de Asistencia Sanitaria, 17 de Atención Humanitaria a Inmigrantes, 9 de Búsqueda y Salvamento en el Medio Acuático, 13 de Búsqueda y Salvamento en el Medio Terrestre, 12 de Comunicaciones y coordinación, y 45 de Intervención Psicosocial. Más de 16.500 personas participan en estos equipos de respuesta en emergencias.
Señala Iñigo Vila:
“Los Equipos de Respuesta Básica en Emergencias están dispuestos para intervenir de forma inmediata; su tiempo para intervenir es variable según la especialidad, el tipo de emergencia y los recursos necesarios, pero como norma general tienen compromiso de disponibilidad inmediata y nunca podrán desplegarse en un tiempo superior a las 12 horas”.
En el ámbito local y comarcal, los Equipos de Respuesta Básica en Emergencias (ERBE) son los equipos diseñados para ofrecer una respuesta básica en emergencias de proximidad a través del voluntariado preparado para las Asambleas Locales, Comarcales e Insulares. Estos equipos, además, brindan información directa y en tiempo real sobre la situación y evolución de lo que está aconteciendo, y si la situación lo requiere, se activa la respuesta especializada de los ERIE. Los ERBE están diseñados para ser integrados en los planes locales de Protección Civil municipales, y se han reforzado en territorios como Castilla y León o la Comunidad Valenciana, y han iniciado su actividad en Castilla-La Mancha, por lo que se plantea para 2021 ampliar su actividad a Asturias, País Vasco, Galicia, Cataluña y Murcia.
La respuesta internacional en emergencias: Emergency Response Unit (ERU)
Cruz Roja Española también dispone de recursos para atender a desastres internacionales a través de la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja; este quipo técnico está para ser desplegado en emergencias con un equipamiento estandarizado y a través de delegados y delegadas internacionales. Las Unidades Respuesta en Emergencias (ERU) están planteadas para ser autosuficientes, como mínimo, durante un mes. Actualmente se cuenta con unidades de Logística, Saneamiento Masivo, Distribuciones, Agua y Saneamiento, Telecomunicación y Clínica de Emergencia.