Para la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), las causas y circunstancias del suceso calificado de “accidente”, en el campo de Cerro Muriano (Córdoba), tras la investigación oficial tiene que trasladarse a familiares, militares y en general a la opinión pública, de manera que se conozca lo ocurrido, las circunstancias y las responsabilidades, en caso de haberlas.

Según la Asociación, la realización de acciones formativas debe estar debidamente regladas y, cuando sean precisas, y contar con medidas de prevención de riesgos laborales.

Que se haya realizado la práctica conforme al Plan General de Instrucción y Adiestramiento (PGIA) previsto, que se hayan tenido en cuenta las circunstancias específicas (en este caso las meteorológicas respecto de las temperaturas dentro y fuera del agua), y que, se hayan dispuesto los medios necesarios en prevención de riesgos, es la información específica y necesaria que se ha de dar con independencia que la investigación judicial lleve a cabo.

La información y la transparencia que tanto escasea en estas circunstancias, por la opacidad del Ministerio, tiene que ser ejemplar para evitar que bulos, pareceres o informaciones interesadas se conviertan en una alternativa que, con el paso del tiempo, se convierta en el conocimiento admitido por la opinión pública.

Desde AUME se elevará al Ministerio de Defensa una pregunta sobre las circunstancias de lo sucedido y resultados de la investigación, para que, en su caso, se depuren responsabilidades y se establezcan medidas precisas y efectivas para evitar otros posibles sucesos.

Para la Asociación los procesos formativos en cuanto a sus contenidos, incluyendo la formación en derechos para quien ejerce el mando, pasan por una revisión conforme a la legislación, para que pueden dar las debidas garantías de seguridad a lo que deben de ser unas Fuerzas Armadas respetuosas con sus componentes y los derechos que les acogen.