Les tiene que quedar claro a los independentistas y a las derechas: Cataluña no va a ser independiente. Es incuestionable en el marco de la ley y la Constitución, además de haberlo manifestado reiteradamente el presidente del Gobierno en funciones. La primera condición que ha planteado para afrontar lo que está sucediendo en Cataluña es la firmeza legal. Esa firmeza provocó la no aprobación de los Presupuestos del Estado con el rechazo de los independentistas, que coincidieron con las tres derechas.

En una entrevista dentro del programa televisivo de Santander: “Conexión Cantabria” emitido el pasado día 17, Óscar Puente, alcalde de Valladolid y portavoz de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE ha realizado unas declaraciones sobre el tema de Cataluña. Como es costumbre en él ha expuesto con claridad, argumentos y pedagogía la situación, el contexto y las soluciones de salida a este problema.

En primer lugar, ha mencionado las consecuencias de la deriva independentista:

- No han conseguido la independencia.

- La simpatía internacional que tienen es nula.

- Han fracturado a la sociedad catalana y olvidan a la mayoría no independentista.

- Generan consecuencias nefastas para la economía: inestabilidad, marcha de empresas, reticencias a las inversiones… Pero lo que es más grave una tremenda despreocupación por los problemas reales de Cataluña.

Al margen de lo anterior, una parte de los que emprendieron ese camino están en la cárcel y grupos radicalizados queman contenedores. Tendrán que comprender la necesidad de hacer política posibilista, pues lo contrario solo les lleva a la frustración.

Aunque se han explicado en múltiples ocasiones, Óscar Puente ha dejado meridianamente claras algunas cuestiones: “Un referéndum de las características que pretenden no cabe en nuestro sistema legal. Nuestra Constitución es clara, no se puede plantear un referéndum ni para Cataluña, ni para cualquier otro territorio de España para separar una parte del resto. Según dice nuestra Carta Magna la soberanía reside en el conjunto del pueblo español, no en una parte del pueblo español. El futuro es un futuro común, un futuro compartido. Hay una posibilidad de decidir por partes, que es el encaje dentro del futuro común y ese le corresponde, sí, al pueblo catalán. De eso podemos hablar, del encaje, del Estatuto, de algo que quepa en nuestra Constitución y que permita a los catalanes decidir su encaje dentro del conjunto de España.”

“Lo que no se puede es decidir cómo desencajamos una parte del conjunto. Eso es incontrovertible. La posibilidad que cabría sería la reforma constitucional; pero para eso hacen falta unas mayorías que no existen, porque ni el PSOE y otros partidos de ámbito nacional están dispuestos a que se troceé la soberanía nacional. Además, posteriormente se necesitaría la aquiescencia soberana de todo el pueblo español. Por tanto, tendrán que moverse dentro de lo posible, que es cómo decidir su encaje en el conjunto de toda España. Ahí pude haber todo el diálogo y negociación, toda la capacidad de imaginar y buscar soluciones, pero dentro de la legalidad y la Constitución.”

Ante los acontecimientos que se están sucediendo en Cataluña hay que buscar soluciones constitucionales manteniendo la serenidad, tal como ha manifestado el ministro de Fomento en funciones y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos. “En Francia se han producido incidentes graves y nadie se ha planteado adoptar medidas tan excepcionales como están comentando algunos”. Tenemos que dar tiempo a nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: Mossos d´ Esquadra, Policía Nacional y Guardia Civil. En estos días están escribiendo una página histórica de lo que constituye el servicio a la ciudadanía para que se mantengan nuestros derechos constitucionales, con un recuerdo especial a los policías heridos.

Estos días que deberían ser de unidad y de apoyo leal al Gobierno, los señores Rivera y Casado se dedican a dar lecciones. Solo buscan sus intereses personales y partidistas. Se olvidan de lo que sucedió en las fechas anteriores al 1 de octubre de 2017, y de lo que aconteció en ese día. La indolencia e inoperancia del señor Rajoy y de la señora Sáenz de Santamaría permitieron la celebración de un referéndum ilegal, aunque ya sabemos las condiciones. Las escenas que sucedieron no se nos han olvidado. El PSOE fue leal en el apoyo al PP y con el artículo 155. Sin embargo, es lamentable que su principal objetivo sea desacreditar la imagen del presidente Pedro Sánchez. El señor Casado, por supuesto, está en su derecho de comentar lo que estime, pero le vendría bien ser más humilde al recordar lo que hizo el PP cuando gobernó. Entre otros aspectos tenemos los recortes en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, la inoperancia en la frontera de Ceuta, la inacción en Cataluña y el modo en cómo salió del Gobierno por la moción de censura.

El presidente del Gobierno se mantendrá al frente del equipo interministerial, que durante las 24 horas se mantiene en actividad permanente en la gestión de los acontecimientos. Todo está previsto y hay que subrayar lo expresado por el ministro del Interior:

1.- Que todas las fuerzas políticas se desmarquen de la violencia.

2.- Que el presidente de la Generalitat, señor Torra y su Gobierno condenen sin equidistancia la violencia.

3.- Continuar con el reconocimiento a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que están en la vanguardia para garantizar los derechos de la sociedad catalana

4.- La importancia de colaborar todos juntos.

Termino con estas palabras de Óscar Puente: “La independencia y los sueños de independencia son una ensoñación. No se puede envolver a un pueblo en una bandera que es una quimera, un sueño, que nunca se va a conseguir.”