“Distópica Hasamblea ‘ilegítima’ Zeutí” (¡A por las vicepresidencias!)
Juegos tradicionales para niños y representantes de la Hasamblea “ilegítima” zeutí
Distopía
El juego de las sillas es todo un clásico en las fiestas de infantiles y en la Hasamblea “ilegítima” zeutí. Para jugar se necesitan sillas resistentes que aguanten el peso de varias décadas de incapacidad y situaciones que bordean o traspasan la legalidad (sobre la Asamblea de Ceuta: «El TSJA da la razón a C’s y los funcionarios en el Gobierno local deberán devolver lo cobrado por residencia. Lo "escandaloso" es que esos abonos "indebidos" se hayan prolongado "durante casi 20 años" sin que "ningún técnico" ni la Intervención ni la Secretaría General alertase de su irregularidad, algo que Varga vio "claro" desde el principio» podíamos leer en un artículo de Ceuta Al Día de antes de ayer, 18 de febrero).
Haremos una correlación entre el juego de las sillas y una imaginaria Hasamblea “ilegítima” zeutí cada día más cuestionada de un territorio de ultradesigualdad social denominado Zeuta.
Las reglas del juego son las siguientes:
1. Tiene que haber tantas sillas como participantes haya en el juego, aunque se deberá quitar una antes de empezar.
- 1.1.Y sí no se crean. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
2. Se necesita un reproductor de música que se pueda parar y reiniciar a voluntad.
- 2.1. O intereses propios o ajenos fácilmente de manipular. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
3. Para comenzar, se colocan las sillas formando un círculo con los respaldos hacia dentro.
- 3.1. Pero siempre, siempre que estén en torno al maestro de ceremonias. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
4. Los participantes se deberán situar de pie alrededor de las sillas y uno detrás de otro.
- 4.1. Siempre sin mirar directamente a los ojos al maestro de ceremonias y rindiendo pleitesía. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
5. Otra persona deberá mantenerse al margen y controlar la música.
- 5.1. Siempre, siempre, será el maestro de ceremonias. Sin él reinará el caos y el juego concluye. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
6. Cuando comienza a sonar la música, todos los participantes deberán girar alrededor de las sillas siguiendo el ritmo de la canción.
- 6.1. Sin perder de vista al maestro de ceremonias y sus deseos por si te castiga y te quita la silla. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
7. En el momento que la persona encargada de la música pare la canción, cada jugador deberá sentarse en una silla.
- 7.1. No sin pedir permiso antes al maestro de ceremonias, tras su autorización se podría sentar. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
8. El que se quede sin silla quedará eliminado.
- 8.1. Salvo que el maestro de ceremonias decida darle otra o hacer un intercambio entre participantes. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
9. El juego se reanudará quitando una silla y así hasta que quede sólo una y dos contrincantes.
- 9.1. Hay excepciones en las que el maestro de ceremonias puede quitar a algún participante en lugar de la silla para darla a algún Voxero que aparezca por allí. En este caso habrá un acto de rendición de pleitesía que debiera ser recíproco. Este artículo no le gusta mucho al maestro de ceremonias, pero si tiene que hacerlo para que continúe el juego y el siga dirigiéndolo ¡lo hará! Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
10. El último en salvarse será el ganador del juego.
- 10.1. Jamás ganará nadie que no sea el maestro de ceremonias, los demás recibirán algunas dádivas y virreinatos varios, pero no la dirección del juego. Articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí.
Anexo al articulado propio de la distópica Hasamblea “ilegítima” zeutí:
Es fundamental para el juego de las sillas que exista algún tipo de música asíncrona, y a veces casi estridente. Una discordancia bien entrenada y profundamente obediente. En este caso podríamos hablar de la ZDisoestruendancia.
Glosario distópico de términos utilizados:
Hasamblea: Corporación compuesta por el presidente de la misma que ejercerá de señor feudal y varios concejales con el título de diputados que rendirán vasallaje al presidente o maestro de ceremonias. Importante destacar que el bien común del municipio estará supeditado al interés particular.
“ilegítima”: Todo aquello que no considere oportuno el grupo Voxero de turno existente en la Hasamblea. Este grupo es el contrapunto perfecto a los derechos humanos. Participa del juego de las sillas, pero con la intención de quedarse con todas y solo dejar que se sienten en ella la raza elegida.
Maestro de ceremonias: persona normal, muy normal que dirige el gobierno de la ínsula y que lo lleva haciendo tanto tiempo que vive de espaldas a la realidad acompañado de una cohorte de palmeros y plañideras o palmeras y plañideros, tanto monta monta tanto. No es que sea malvado es que cuando uno se aleja tanto de su pueblo y se perpetúa en la creencia de estar en posesión de la verdad absoluta ocurren estas cosas. O se descansa de estas labores o se rodea uno de un gran equipo de trabajo. Ni lo uno ni lo otro ha hecho el maestro.
ZDisoestruendancia: Sonido monótono con profundo acento direccionado que reproduce fielmente la voz de su jefe o jefa. Básicamente tiene un único registro modulado por la mano que mece la cuna, viene a sonar así: “la delegada no se peina bien, la delegada tiene la culpa de la extinción de los dinosaurios, la delegada no está capacitada, la delegada nos deja sin pescado, la delegada implicada en la conspiración para que Plutón dejara de ser un planeta, la delegada…, la delegada…, la delegada…” Para que este sonido resuene nítidamente es necesario un amplificador silencioso marca PSOE local. (Puede Ser O Es pero no será).
Zeuta: ínsula de gran belleza acariciada por los rayos del sol y las manos amorosas de la mar en la que conviven distintas culturas, pero en la que gobierna la desigualdad y la injusticia social.