La aprobación del nuevo sistema de cotización de autónomos viene a suponer para todos estos, una modificación importante respecto al sistema anterior. La cotización estará basada en los rendimientos netos de su actividad no pudiéndola elegir libremente como hasta ahora se hacía.

El nuevo modelo, se va a implantar gradualmente en los próximos 9 años, va a permitir acercarse al sistema seguido en el pago de la Seguridad Social (INSS) a los trabajadores por cuenta ajena. Aquellos que ingresen más, también deberán pagar más, y a la inversa. Lo que, supondrá un paso en la protección social de los autónomos, ya que, en el sistema actual la pensión de los autónomos es un 60% inferior que los trabajadores del régimen general.

Esta situación tiene un impacto añadido en nuestra ciudad. Los autónomos acogidos en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), tienen una bonificación del 50 por ciento en sus cotizaciones a la INSS., la cual, desaparece con la nueva ley, limitándola a la base mínima de cotización por contingencias comunes.

La limitación de las bonificaciones para las ciudades implica que todos los autónomos que no cotizan por la base mínima perderían el derecho a la bonificación de su cuota completa. O sea, un trabajador autónomo en Ceuta, cuya cuota en 2023 fuese de 275 euros, se podrá deducir una cantidad máxima idéntica a un trabajador autónomo cuya cuota sea de 580, 810 o 1.200 euros, sin distinción.

Este, por tanto, se enfrenta a incrementos de sus costes que pueden alcanzar entre un 25% y un 80%, dependiendo del tramo de cotización, respecto a la situación actual. Y ese sobrecoste se produce exclusivamente por la imposibilidad de aplicar unas bonificaciones que han sido eliminadas y a las que sí se habría tenido derecho hasta el momento.

La situación es tan grave como lo puede ser para cualquier empresa o economía que se enfrente a aumentos de costes de esas dimensiones, con el agravante de que nuestros autónomos están sometidos a las consecuencias derivadas de la difícil situación económica local, nacional y mundial.

La Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) considera que cualquier rectificación de la norma es “susceptible de ser afrontada con la voluntad política adecuada”, y debe, conducir a un sistema de bonificaciones que, “respete la singularidad económica y fiscal de nuestra ciudad, que no suponga una discriminación frente al régimen general”, y que, “en ningún modo suponga un perjuicio ni un empeoramiento de los derechos que tradicionalmente han tenido nuestros autónomos”.