El Estado debe localizar y exhumar a las víctimas del franquismo de todas las fosas comunes
Los restos de diecinueve personas son los recuperados en Jimena de la Frontera, tras los trabajos realizados en 2020 y 2021.
El Foro por la Memoria del Campo de Gibraltar agradece a la Diputación de Cádiz, la Mancomunidad de Municipios de esta comarca y el Ayuntamiento de Jimena de la Frontera el apoyo dado a las exhumaciones realizadas este verano y el pasado en este municipio y el que recibirán las próximas que se van a hacer en La Línea de la Concepción y Tarifa, pero recuerda una de sus reivindicaciones básicas: el Estado central es el que debe realizar la localización y exhumación de todas las fosas que hay en España en una labor continua y con medios, personal y apoyo financiero permanentes en sus Presupuestos Generales.
La verdad, la justicia y la reparación para todas las víctimas del franquismo no deben quedar en manos del voluntarismo o la implicación más o menos sensible o comprometida de los Ayuntamientos o Diputaciones porque sean de un signo político o de otro. Esta labor debe ser una cuestión de Estado, un principio básico de actuación de la democracia sobre la que no debe haber ningún tipo de dudas ni diferencias. Consideramos que este principio debe quedar perfectamente expresado con claridad y contundencia, sin ningún lugar a dudas, en la nueva ley de memoria que se está tramitando en el Congreso de los Diputados pues es lo mínimo que se debe hacer en un país donde las enterradas clandestinamente en fosas comunes y en las cunetas de las carreteras son más de 120.000 personas.
El foro agradece profundamente el trabajo realizado por todas las personas que han participado este verano en la segunda fase de las exhumaciones de víctimas del fascismo que se han desarrollado en el Cementerio Municipal de Jimena de la Frontera. Este trabajo ha concluido con la localización de restos de seis personas asesinadas por las fuerzas fascistas durante la guerra de 1936-39 y la posguerra. Sumados a los de trece personas hallados en el verano de 2020, el total de víctimas localizadas en este cementerio, por el momento, asciende a diecinueve.
Los trabajos desarrollados este verano empezaron el pasado 1 de junio en el patio número 4, el que está a la derecha tras pasar la entrada del recinto. Estaban coordinados por el arqueólogo Jesús Román Román y dirigidos por la arqueóloga María José Gámez Cano, con quienes han colaborado personal contratado, estudiantes y voluntariado. Estaban financiados por la Diputación Provincial de Cádiz, Ayuntamiento de Jimena y la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar.
Las prospecciones realizadas este mismo verano en parte del pasillo central del cementerio y en el patio de la izquierda para intentar localizar nuevas fosas no han dado resultado positivo. El foro y las administraciones implicadas estudian ahora sí continuar la búsqueda de fosas en otros lugares del recinto.
Todos los restos de fusilados hallados este año, como los del anterior, presentan señales de haber sido enterrados sin respeto y videncias de muerte violenta. Todos los restos, que están siendo custodiados en una dependencia del cementerio, van a ser estudiados científicamente por antropólogos físicos. De ellos se extraerán muestras para ser sometidas a un análisis de su ADN que se realizará en la Universidad de Granada. Los resultados de estos análisis serán comparados con los del ADN que han donados varias decenas de personas que tienen antepasados que fueron víctimas de los asesinatos cometidos por las fuerzas fascistas en Jimena durante y después de la guerra.
El foro espera que la comparación de estos ADN permita la identificación del máximo de personas posible. El foro recuerda que las investigaciones oficiales tenían documentados la muerte de al menos 98 víctimas del franquismo en Jimena, la gran mayoría fusilados, o vecinos de este pueblo en otros municipios. A estas 98 personas el foro ha añadido los nombres de veintitrés personas más que han sido identificadas en el curso de las entrevistas realizadas en 2019 y 2020 a personas que buscan a sus antepasados fusilados durante o después de la guerra.