El robo del cable de fibra óptica en Tarragona ha interrumpido la circulación de la línea de alta velocidad entre Madrid-Barcelona, afectando también a veintisiete trenes AVE, AVLO y Ouigo y aun número elevado de pasajeros, que han tenido que ser desviados en otros trenes y autocares.

Este acto vandálico, fue producido por un joven de 19 años, el cual, se ha resistido a su detención por los Mossos d’Esquadra y estos, no descartan más detenciones. Suponemos que esta acción no solo quedará en un delito de robo, al que habrá que sumarle resistencia a la autoridad, daños…  

Aparte, los viajeros han presentado sus correspondientes reclamaciones, también por daños y perjuicios… Todo esto más los gastos de reposición de la línea, perdida de otros enlaces, un sinfín de cargos que esperemos que a la justicia no obvie ninguno y le caiga todo el peso de la Ley, que todavía lo puede considerar como un atentado, pues ha supuesto problemas en las comunicaciones, señalización, sistemas de telemando de energía, detectores de caídas de objetos y otros dispositivos de seguridad en la zona de corte, según ha informado Adif.