Liberadas 12 víctimas en Mijas y desarticulada una organización de trata de mujeres para su explotación sexual
Las víctimas eran reclutadas en sus países de origen y trasladadas hasta la provincia de Málaga, contrayendo así una deuda de 3.000 euros.
Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, en el marco de la operación Dawn/Buitre, han desarticulado una organización delictiva dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual en Mijas (Málaga). Han sido arrestadas 10 personas (entre ellas el cabecilla y su mano derecha) por su presunta implicación en los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, relativos a la prostitución y explotación sexual, contra los derechos de los trabajadores, contra la salud pública, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal. Han sido liberadas 12 mujeres que estaban siendo explotadas sexualmente en un chalet de la localidad de Mijas, regentado por el principal investigado.
Además, se llevaron a cabo dos inspecciones de trabajo en sendos establecimientos hosteleros. Y, se realizaron tres entradas y registros en los que se intervinieron, entre otros efectos, 52 gramos de cocaína, más de medio kilogramo de hachís, 0,56 de MDMA, 27.232 euros, un machete, una pistola eléctrica, 40 cartuchos detonadores y varios vehículos de gama alta
Las mujeres eran reclutadas en sus países de origen en Sudamérica y trasladadas hasta España, concretamente hasta un chalet en Mijas, asumiendo el principal investigado el coste total del viaje. A su llegada a la localidad, las víctimas eran obligadas a ejercer la prostitución en jornadas de 24 horas, siete días a la semana, hasta resarcir la deuda contraída con la organización.
Inicio investigación: una llamada a la línea 900 10 50 90
La investigación se inició a raíz de una llamada al teléfono 900 10 50 90 (perteneciente al plan de la Policía Nacional contra la trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual), en la que ponía en conocimiento unos hechos que podían ser constitutivos de delitos de trata de seres humanos con fines de Explotación Sexual, Relativo a la Prostitución, Contra el Derecho de los Trabajadores, Contra la Salud Pública, Blanqueo de capitales.
Los agentes recibieron informaciones que apuntaban a la existencia de un grupo organizado compuesto de 10 personas -casi todas de nacionalidad colombiana- que regentaba una casa de citas en la localidad de Mijas. En esta, habría entre 15 ó 16 mujeres, la mayoría en situación irregular, muchas de ellas habrían sido captadas en Sudamérica y trasladadas a España para ser explotadas sexualmente, durante todos los días de la semana y sin apenas descanso, para saldar la deuda que habrían contraído por su traslado a nuestro país, unos 3000 euros. Además, la trama se lucraba tanto de los servicios sexuales como del alterne prestados por las víctimas que percibían ínfimas ganancias por sus servicios.
Organización asentada en la provincia de Málaga
Tras varias gestiones, los investigadores constataron la veracidad de la información. Se trataba de un grupo perfectamente organizado en el que cada uno de los integrantes desempeñaba una función determinada. El clan, que contaba con la colaboración de varios familiares, estaba liderado por dos hermanos y en el escalafón inmediatamente inferior se encontraba el cuñado del primer investigado que era el encargado de la seguridad de la casa y del control de todas las actividades que allí se realizaban y que iban desde la venta y distribución de sustancias estupefacientes y fármacos a los clientes que acudían a las citas, hasta la comisión de estafabas a través de cargos fraudulentos o no autorizados en las tarjetas bancarias de estos.
La organización criminal para dar apariencia legal al dinero obtenido de sus actividades ilegales, se dedicaba a la compraventa de vehículos de segunda mano, así como a la adquisición de inmuebles; también se valía de dos establecimientos de hostelería que regentaban los investigados en Marbella y Málaga.
La investigación culminó con la detención los líderes de la red y otros siete integrantes.
Desde la Guardia Civil y la Policía Nacional se recuerda que las unidades especializadas combaten la trata de seres humanos en sus diferentes vertientes de explotación laboral y sexual como es el caso, siendo la aportación ciudadana fundamental. A través de la línea telefónica 062 y el correo electrónico [email protected] de Guardia Civil y teléfono (900 10 50 90 de Policía Nacional, medios de comunicación totalmente gratuitos, confidenciales y anónimos, tratamos de fomentar la colaboración ciudadana, máxime durante la proliferación de este tipo de establecimientos conocidos como “casas de citas” durante la vigencia del actual Estado de Alarma.
La operación ha sido llevada a cabo por unidades de investigación de la Policía Nacional y Guardia Civil en Málaga y dirigida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Fuengirola. (Málaga).