“La figura de la matrona es fundamental para que la humanidad siga evolucionando”. Así define su profesión José Antonio Campos García, jefe de estudio de la Unidad Docente de Matronas, quien afirma que “todo el mundo necesita una matrona a su lado en el momento del parto para no correr riesgos”.

La esencia de esta profesión, según Campos, se puede ver en la “felicidad de esa pareja que después de horas de parto tiene al bebé en sus manos. La emoción de ese momento hace que en algunas ocasiones tengas que salirte fuera”, relata visiblemente emocionado.

Pero las matronas no solo se ocupan de la asistencia en el nacimiento, la misión de estos profesionales es va mucho más allá. “Desempeñamos un papel que puede durar varias horas. Desde la valoración clínica, evolución del parto y acompañamiento hasta el nacimiento del bebé, que es aquí cuando tenemos que favorecer la adaptación extrauterina del feto, así como mantenerlo caliente y cerca de la madre”, describe el matrón.

Este algecireño, encargado de la Unidad Docente de Matronas del INGESA, lleva trabajando en el Hospital Universitario de Ceuta desde el 2003 y ha asistido a más de 1.800 partos en sus más 18 años de profesión dedicados plenamente al oficio más antiguo de la historia.

A lo largo de los años, la profesión de matronas en Ceuta se ha consolidado como una de las más valoradas por pacientes y profesionales. El jefe de estudio de esta unidad considera que una de las claves para conseguir ese valor ha sido la “autonomía” que hay entre ginecólogo y matrona. Campos destaca que “históricamente en Ceuta no se ha perdido nunca esa autonomía. Nadie interfiere en el trabajo del otro y esto es un valor seguro para aquellas residentes que luego marchan a otros hospitales”.

La satisfacción de estos profesionales pasa por sentirse autónomo en su trabajo, pero siempre con una “comunicación horizontal” con los ginecólogos, ya que ellos también son los encargados de la “supervivencia humana”. Esta confianza el uno en el otro “sirve para que el Hospital Universitario de Ceuta sea un lugar diferente para trabajar, ya que en otros centros no existe esa autonomía plena entre matrona y ginecólogo, expone el jefe de estudio de la Unidad Docente de Matronas.

Ahora, después de casi dos décadas centradas en la asistencia a partos, Campos tiene un nuevo reto en el horizonte, la gestión de la Unidad Docente de Matronas para la formación de las residentes que lleguen a Ceuta. “Es una gran responsabilidad”, afirma el profesional, quien va a proponer la implantación de la herramienta ECOE para la evaluación de las matronas residentes. Una técnica novedosa que tiene su origen en la Unidad Docente de Valladolid y que Campos ha acudido hasta allí para poder reproducir y trasladar todos los fundamentos de esta herramienta, que tiene el sello de las buenas prácticas del Ministerio de Sanidad, al Hospital Universitario de Ceuta. “Quería darle las gracias a la Unidad Docente de Valladolid, encabezada por María Jesús Gutiérrez por darme la oportunidad de conocer su modelo en primera persona e intentar consolidarlo en Ceuta”, relata el profesional sanitario.

Además de los nuevos instrumentos que quiere incorporar a su Unidad Docente, Campos recuerda que “contamos con un gran equipo docente, que lleva muchos años de experiencia y que llevan un amplio currículum docente”.

José Antonio Campos, un matrón pionero en la formación de alumnos

La amplia carrera profesional de este enfermero también ha estado marcada por la formación de las futuras matronas. En octubre del año 2011, la Unidad Docente de Matronas del Hospital Universitario de Ceuta se convirtió en una de las pioneras de toda España en la creación de un campus virtual dedicado a la formación de residentes.

Una plataforma, que se diseñó y comenzó como proyecto piloto en 2010, y que nació con la intención de fomentar la accesibilidad a la unidad docente y convertirse en punto de encuentro común, asentar una metodología semi-presencial y adaptarse a las nuevas tecnologías. Se basa en el modelo de plataformas tecnológicas ‘Moodle’, un sistema de gestión de recursos que propicia comunidades de aprendizaje en línea.

Este proyecto fue posible gracias al esfuerzo del personal de Partos del HUCE y del matrón José Antonio Campos, quien participó en la activación del campus.

A día de hoy sigue funcionando, y está a la espera de una nueva actualización que fomente el campus virtual.

“Estamos encantadas con la formación y con la manera de trabajar que hay en el Hospital Universitario de Ceuta”

Claudia Martínez Picón (R2) y Paloma Domínguez Caballero (R1) son dos enfermeras que están haciendo la residencia de matronas en Ceuta y ambas coinciden que este Hospital, en concreto, es el “lugar idóneo para una buena formación, ya que tanto matronas como ginecólogos trabajan de la mano, pero respetando su espacio”.

¿Qué diferencia existe con otros hospitales de la Península? Martínez lo tiene claro y destaca la libertad a la hora de trabajar. “He rotado en otros hospitales intervencionistas y te das cuenta de la manera diferente de trabajar que hay aquí con respecto a otros hospitales. En muchos hospitales de la Península el ginecólogo lleva el parto fisiológico, y aquí se le da esa autonomía a las matronas para que realice su labor”.

Para estas enfermeras, la vocación por este trabajo les ha valido para hacerse un pequeño hueco en la Unidad Docente de Matronas del HUCE, y es que las dos aseguran que el paritorio es “el lugar con mayor felicidad del centro sanitario”, y esto para ellas es algo que “quieren vivir toda la vida como profesional”.

Por último, Martínez y Domínguez quieren quedarse en Ceuta, pero ya como matronas de hecho y esperan que cuando se abra la bolsa de trabajo tengan un hueco en el HUCE. “Nuestras generaciones anteriores han trabajado aquí. Hay mucha demanda de matronas en Ceuta, pero no es un sitio donde sea imposible trabajar”.