Informe de gestión. Consejo de Participación del INGESA
INGESA disminuye de 91 a 70 días la media de espera para cirugía respecto a 2018
El Consejo de Participación del INGESA se ha reunido en Madrid con los informes de Gestión y de Ejecución de Presupuesto de 2019, y la Memoria 2018 en el orden del día.
El Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA) ha reducido los tiempos de demora en Ceuta y Melilla, situando la media para espera quirúrgica en el primer semestre en 70 días, 21 menos que los 91 días de media registrados en 2018. Éste es uno de los datos recogidos en el Informe de Gestión de enero a junio de este año que ha presentado la entidad ante el Consejo de Participación del INGESA reunido hoy en la sede del Instituto en Madrid y presidida por el secretario general de Sanidad, Faustino Blanco.
Estos datos sitúan al INGESA muy por debajo de la media nacional del Sistema Nacional de Salud, situada en 93 días. Con los últimos datos disponibles a 30 de junio de este año, el número total de personas esperando una operación en INGESA también ha disminuido y ha pasado de 1.312 a 1.257. Asimismo, han disminuido las personas que esperan en los tramos más largos: se ha pasado de 3 a 0 personas con más de 1 año de demora; de 174 a 58, los que llevan más de 180 días de demora; y de 381 a 315, los que llevan más de 90 días de demora.
El Informe recoge otros parámetros como el número total de ingresos hospitalarios, que ha disminuido algo más de un 2% respecto al mismo semestre del año anterior al registrarse un total de 6.809 frente a los 6.958 de 2018 y se mantiene así la tendencia iniciada el año anterior. En la misma línea, en ambas ciudades ha bajado el número de urgencias atendidas, y en el global del INGESA la reducción es de un 3,2%. Esta circunstancia justifica en parte la reducción de la cifra de ingresos.
Durante la reunión, los asistentes también han podido repasar el estado de ejecución del presupuesto de 2019 (prorrogado de 2018) a 30 de junio. A esa fecha, el INGESA ya había ejecutado el 44% de su presupuesto que asciende a 259 millones de euros. Por capítulos, la mayor partida es la destinada a personal (139 millones de euros), de la que ya se ha ejecutado el 47,5% del presupuesto. Por programas, la mayor partida corresponde a atención especializada (173 millones de euros), del que ya se ha ejecutado el 43%.
En cuanto a la Memoria 2018, “los resultados han sido satisfactorios”, según ha subrayado el director del INGESA, Alfonso Jiménez Palacios: “Hemos cumplido con la gran mayoría de los objetivos marcados”. En lo relativo a las infraestructuras, el mayor hito ha sido la reanudación de las obras del Hospital Universitario de Melilla tras cinco años de paralización.
En cuanto a la atención sanitaria, se aprecia una tendencia a la baja en la actividad de Atención Primaria y Especializada. Han descendido discretamente el número de
consultas (Medicina de familia, Pediatría, Enfermería y Fisioterapia). En especializada, han disminuido tanto los ingresos como las estancias hospitalarias en ambas ciudades.
En relación a la prestación farmacéutica, se ha moderado el incremento en número de recetas (3,1%) y en el gasto medio por receta (0,19%) y se mantienen dentro de las medias del SNS. También cabe destacar que el uso de la receta electrónica en 2018 ha superado el 91% de los envases facturados al INGESA, lo que supone 5 puntos porcentuales más sobre 2017.
Ya saliendo de lo que es la asistencia sanitaria en Melilla y Ceuta, destaca la actividad de gestión de las Compras Centralizadas con miras al SNS: a finales de 2018 ya eran 13 las Comunidades Autónomas adheridas al sistema (todas excepto Andalucía, Canarias, País Vasco y Cataluña). Hasta diciembre de 2018, el sistema de compras centralizadas ha acumulado un total de 15 licitaciones por un importe de más de 2.700 millones de euros y un ahorro estimado de 237 millones. Hay que destacar que Canarias ya se ha incorporado en este año 2019 y Andalucía está tramitando su adhesión.
La Memoria también recoge la actividad del Centro Nacional de Dosimetría y Protección Radiológica (dependiente del INGESA), que ha sido la habitual en la lectura y control dosimétrico de los profesionales del SNS y en la protección radiológica en las instalaciones del INGESA y de la comunidad de Castilla-La Mancha. A lo largo de 2018 se han mantenido las casi 52.000 historias dosimétricas abiertas y se han revisado 337 equipos.
Por último, cabe destacar que el INGESA logró en 2018 un grado de ejecución presupuestaria de un 96,83%, lo que se traduce en 257 millones de euros.
“En resumen, 2018 ha sido un año complicado, en el que, con el esfuerzo de todo el personal hemos conseguido cumplir casi todos los objetivos marcados. Muchas gracias a todos por hacerlo posible”, ha concluido el director.
El secretario general de Sanidad, en su intervención, también ha querido agradecer a todo el personal del INGESA “el excelente trabajo realizado”: “Es una gran satisfacción comprobar el buen funcionamiento de los servicios que gestiona el INGESA”, ha añadido.
“Desde el Ministerio de Sanidad, queremos implicarnos de una forma especial en la consolidación de una atención sanitaria excelente en Melilla y Ceuta, y en la estabilización del personal que trabaja en los servicios sanitarios”, ha subrayado el también presidente del INGESA. En palabras de Blanco, “son muchos los retos que tenemos por delante, y quiero expresar mi más firme compromiso para enfrentarlos y prestar más y mejores servicios a la ciudadanía”.