Feijóo será presidente por cuarta legislatura gracias a una nueva mayoría absoluta
El PP tiene 42 escaños (con el 88% escrutado), uno más que en 2016 lo que les permite mantenerse en el poder. El BNG se convierte en segunda fuerza política gracias a una enorme subida que le da 13 escaños más que en la pasada legislatura hasta alcanzar los 19. El PSOE de Galicia, liderado por Gonzalo Caballero, mantiene los apoyos del 2016 pero se esperaba una mejoría, por lo que los socialistas se llevan una pequeña decepción. El gran perdedor es Podemos que desaparece del Parlamento Gallego tras ser la segunda formación política más votada hace cuatro años. El partido de Pablo Iglesias y las mareas de diluyen seis años después de su primera irrupción electoral.
Alberto Núñez Feijóo se sitúa a la par que el histórico Manuel Fraga y seguirá liderando la Xunta de Galicia gracias a su cuarta mayoría absoluta. Un resultado electoral que en estos tiempos de fragmentación política supone el espaldarazo definitivo para el líder conservador que se sitúa como el gran favorito del PP nacional si la estrategia de Casado no termina de fraguar.
La encuesta de la televisión gallega ponía algo de incertidumbre en el inicio del recuento de papeletas al anunciar una encuesta en la que el PP podía perder la mayoría absoluta. Pero fue solo un espejismo, desde el minuto 1 el partido de Feijóo se sitúo en porcentajes de voto que fortalecían esta gran mayoría absoluta. La estrategia de Feijóo de situarse prácticamente fuera de la línea marcada por su partido en Madrid ha sido perfecta, a tenor de los resultados. Y es, en cierto modo, una derrota de Casado ya que el líder gallego hizo una campaña de bajo perfil sin las indecentes posiciones frentistas del presidente de su partido a nivel nacional.
El otro partido triunfador de la noche fue el BNG que recupera de golpe todo el voto que perdió cuando emergieron las mareas y Podemos. La formación de Ana Pontón tendrá una veintena de diputados en el parlamento gallego recuperando de una tacada 13 escaños. El porcentaje de voto, que supera ampliamente el 20% sitúa a los nacionalistas gallegos como el partido que liderará la oposición y como la formación que podría sacar al PP del poder en futuras citas electorales.
Para el PSOE de Galicia, las expectativas eran mayores que las que finalmente resultaron. Gonzalo Caballero repite resultados del 2016 y tendrá nuevamente 14 diputados en la cámara gallega. Con casi el 20% del voto escrutado se consolida como tercera fuerza en Galicia. Si en 2016 tuvo que conformarse con la ‘medalla de bronce’ detrás de Podemos, ahora ve como el BNG pega el ‘sorpasso’ a los socialistas. Los de Caballero veían la posibilidad de avanzar y situarse más arriba, pero no pudo ser.
El batacazo sin paliativos es el de Podemos-Esquerda Unida-Anova. De ser la segunda fuerza política se ha quedado fuera del parlamento con una espectacular caída. Pablo Iglesias deberá dar explicaciones de lo que ocurre en su partido bajo su ‘mano de hierro’. Cada vez que se abren las urnas, los morados pierden votos de manera incontrolable. Y ni siquiera su llegada al poder del Gobierno de España hace que se frene esta tendencia. La situación comienza a ser preocupante para ellos.
Por último, ni Ciudadanos ni Vox consiguieron el mínimo necesario para llevarse algún diputado. Se trata de un mal resultado para unos partidos de carácter nacional ya que se quedan sin representación en una comunidad histórica como es Galicia.