El pasado miércoles el Centro de Investigaciones Sociológicas presentaba su barómetro de junio en el que destacaba los buenos datos electorales que conseguiría el PSOE en caso de celebrarse elecciones. Pero el CIS no solo analiza la coyuntura política también pregunta por otras cuestiones de interés para la sociedad. Estas son las principales claves:

- El PSOE sigue muy por delante en intención directa de voto: un 30,7% de los encuestados dicen que lo votarían si mañana hubiera elecciones, un nivel parecido al de octubre de 2018 (30,8%). Además, aumenta la distancia respecto al segundo (Ciudadanos).

- Ciudadanos está en retroceso y muchos de sus votantes miran al PSOE: la intención directa al partido de Rivera es del 12,3%, y baja más de un punto respecto al mes pasado (13,4%). La fidelidad de sus votantes se resiente, y cada vez más de ellos votarían a otros partidos (4,6% al PSOE) o están indecisos (6,8%). Además, un 22,3% de quienes quizá votaran a Ciudadanos también se plantean votar al PSOE o al PP (27%)

- Pedro Sánchez sigue siendo el líder político mejor valorado (4,8 sobre 10) y se mantiene en los niveles más altos de la serie histórica. Pablo Casado mejora ligeramente su puntuación media, mientras que Rivera, y especialmente Iglesias, empeoran mucho su valoración respecto al mes anterior.

- Hay una preferencia clara por la vivienda en propiedad: el 81,8% de los encuestados prefieren comprar una vivienda, y el 59,9% de quienes viven de alquiler lo hacen porque no disponen de ingresos suficientes para comprar o como solución temporal hasta poder comprar. Entre los viven de alquiler y no quieren comprar (apenas 4 de cada 10) las razones aducidas son el no querer hipotecarse (13,8%), disponer de mayor movilidad (8,5%) o las condiciones de la renta de alquiler (6,4%).

- Los encuestados reclaman políticas para proteger el derecho a la vivienda. Nueve de cada diez consideran que el gobierno debe proteger de manera activa el derecho. Las medidas más apoyadas son la construcción de viviendas sociales para personas con pocos recursos (52,8%), los préstamos baratos para la compra (49,9%), el fomento de la construcción de viviendas asequibles (46,9%), la limitación del precio de los alquileres (41,8%), un parque público de viviendas en alquiler (38,3%) y socializar el suelo para no encarecer el precio de las viviendas (31,4%).

- Dar garantías a los propietarios para fomentar el alquiler. Aumentar la seguridad jurídica para que los arrendadores tengan garantizado el cobro de la renta es la política de fomento del alquiler más apoyada (87,6%).

- Ayudas para la rehabilitación de viviendas. Una amplia mayoría, el 87,4%, considera que las administraciones públicas deberían adoptar iniciativas para ayudar a la rehabilitación de viviendas, fundamentalmente ayudas para pagar parte de la rehabilitación (52,3%) o facilitar créditos baratos (43,7%).