No hay confinamiento domiciliario, Sanidad ha declinado este tema de la reunión
A partir del próximo 9 de noviembre, el toque de queda será el comprendido entre las 22.00 y las 7.00 horas.
La Ciudad ha planteado al Gobierno de la nación, a través del Ministerio de Sanidad, en el Consejo Interterritorial de Salud previsto en esta tarde del miércoles, la necesidad de decretar el confinamiento de la población y la suspensión de la actividad esencial similar al de marzo.
Pues no hay confinamiento domiciliario, tema debate llevado por algunas comunidades y ciudades autónomas, como Asturias, Melilla y Ceuta, al Consejo Interterritorial de Salud se ha declinado por parte del Ministerio. El País Vasco ha pedido cambiar el decreto del estado de alarma, para poder confinar a la población y endurecer el toque de queda. Enrique Ruiz Escudero, homólogo de Javier Guerrero, en la Comunidad de Madrid, manifestaba en Cuatro al Día, que había estado muy atento en la reunión y que, “nadie había planteado el confinamiento domiciliario”. “No ha sido un tema que se ha puesto en la mesa al menos de manera oficial”, aseguró.
Vivas previendo que no llegara a decretarse dicho confinamiento o de que dicha decisión se retrasara mientras se estudia la efectividad de las medidas restrictivas en dos semanas, el Gobierno de la Ciudad ha optado por “intensificar” las limitaciones y restricciones,
Por ello significa que, a partir del próximo 9 de noviembre, el toque de queda será el comprendido entre las 22.00 y las 7.00 horas.
Vivas como autoridad delegada, ha restringido (solo autorizados) el cierre perimetral de Ceuta de manera ininterrumpida. Además, de la permanencia de grupos de personas en espacios públicos o cerrados no podrá superar el número máximo de 4, salvo que se traten de convivientes.
Vivas ha manifestado
“Creo que, en Ceuta, en estos momentos, hay que decir que más vale prevenir que lamentar y que llorar”.
También ha insistido en la necesidad de actuar de manera “enérgica” para que:
“Cuanto antes, podamos salir de esta pesadilla que a todos nos tiene perjudicado el ánimo. Antes podremos reducir los costes, los gastos y los prejuicios en todos los ámbitos que esta situación no está conllevando”.