Después de lo ocurrido en la fiesta de cumpleaños, la Consejería de Sanidad, Consumo y Gobernación, ha tomado la decisión de decretar el aislamiento y confinamiento obligatorio en sus viviendas, bajo estricta vigilancia policial para evitar incumplimiento de lo ordenado, en siete viviendas de los Grupos Erquicia y en la calle Joaquín García de la Torre (Sidi Embarek), que afectan a 121 personas entre casos positivos y contactos estrechos, por ser la forma más efectiva de limitar la propagación y contagio del covid-19.

La Consejería, ha tomado esta decisión después de que se hayan detectado al menos doce casos en diversos domicilios de ambas zonas. Lo que significa un repunte en la Fase 2 de la desescalada, la cual podría frenar el pase a la Fase 3, lo cual, según el Ministerio de Sanidad, no contempló en su comunicado por tener garantías de que la situación sanitaria está controlada y ha surgido el foco del rebrote en la periferia y por los motivos que lo originaron.

INGESA y el Servicio de Vigilancia Epidemiológica de la Ciudad está realizando el seguimiento a 170 personas, que son contactos de casos activos, cifra que asciende a 1.840 personas aproximadamente desde que comenzó la pandemia.

Por otro lado, las áreas de Sanidad y Servicios Sociales, atienden y proporcionan las necesidades al personal aislado en confinamiento, que no cuenten con medios o recursos para poder abastecerse de alimentos y medicamentos o que requieran de asistencia para la recogida de basura. La Ciudad ha proporcionado un alojamiento alternativo a seis personas.

La Ciudad, a través del Colegio de Psicólogos, proporciona asistencia gratuita a los afectados, y se coordina con Cruz Roja para la prestación de esos servicios a las personas o familias aisladas.