Entre la representación del BAA “Galicia” se encontraban los guardiamarinas de la Escuela Naval Militar de Marín en Pontevedra.
Este Sábado Legionario se conmemoró las laureadas colectivas y la acción de Tizzi Azza
Zacarías Hernández: “Vivimos en una época sin aprecio por el heroísmo, en la que los modelos a imitar no existen, la conducta heroica desentona, y puede llegar a estorbar”.
Hoy sábado 4 de junio a las doce del mediodía se ha desarrollado en el Acuartelamiento “García Aldave” una parada militar dedicada a la concesión de las laureadas colectivas a diferentes unidades del 2º Tercio de la Legión, presidida por el comandante general de Ceuta, Marcos Llago Navarro, al que han acompañado El director del Instituto de Historia y Cultura Militar, los generales segundos jefes de las Comandancias de Ceuta y Melilla, y el coronel jefe del Tercio Gran Capitán Primero de la Legión (Melilla). Aparte de los jefes de las unidades de la COMGECEU y otras autoridades civiles y militares.
Además, también ha asistido una representación del Buque de Asalto Anfibio Galicia de la Armada, actualmente atracado en el Muelle España del Puerto de Ceuta, entre los que se encuentran los guardiamarinas de la Escuela Naval Militar de Marín en Pontevedra.
Han formado al mando del teniente coronel jefe de la Bandera “Cristo de Lepanto” IV de La Legión del Tercio Duque de Alba, su Escuadra de Gastadores, su Mando y Plana Mayor, cinco de sus compañías, los guiones laureados del 2º Tercio, así como su Banda de Guerra, además de la Unidad de Música del Batallón del Cuartel General de la COMGE.
La secuencia del acto ha comprendido el relato de los hechos que motivaron la concesión de las laureadas, donde la enseña nacional del Tercio “Duque de Alba”, 2º de la Legión, luce entre sus pliegues 18 condecoraciones colectivas que le han sido concedidas, entre las que destacan 5 Cruces Laureadas de San Fernando. Junto con las 11 cruces laureadas individuales, hacen de este Tercio la Unidad más laureada de la Legión y una de las más laureadas, siendo Regulares la más laureada del Ejército Español lo cual se puede apreciar en su penacho.
A continuación, fue la emotiva despedida de la bandera del personal que pasa a la situación de reserva, imposición de condecoraciones, nombramiento de legionarios de honor, alocución del coronel jefe del 2º Tercio, homenaje a los que dieron su vida por España, himno de la Legión, recitado de espíritus y desfile de la fuerza.
La enseña nacional del Tercio “Duque de Alba”, 2º de la Legión, luce entre sus pliegues 18 condecoraciones colectivas que le han sido concedidas, entre las que destacan 5 Cruces Laureadas de San Fernando. Junto con las 11 cruces laureadas individuales, hacen de este Tercio la Unidad más laureada de la Legión y una de las más laureadas, siendo Regulares la más laureada del Ejército Español lo cual se puede apreciar en su penacho.
Alocución del coronel
En la alocución del coronel del Tercio, Zacarías Hernández Calvo, mencionó que la Cruz Laureada de San Fernando, es la máxima recompensa militar de España, tiene por objeto premiar el valor heroico. La acción realizada incluso puede suponer la pérdida de la propia vida.
Zacarías Hernández, aludió a que:
“Vivimos en una época sin aprecio por el heroísmo, en la que los modelos a imitar no existen, la conducta heroica desentona, y puede llegar a estorbar”.
Basándose en el heroísmo el coronel aseguró que:
“Un Ejército en el que la realidad de la guerra no aparece como posibilidad, acabará volviéndose inútil”.
También hablo del espíritu legionario, su credo, y sus laureadas, reforzándolo con frases de Ortega y Gasset, y Calderón de la Barca dejando claro la palabra de este: “es obedecer”. Asimismo, como motivación dijo que:
“Debemos sentir la voz de ‘a mí la Legión’ cada mañana y estar constantemente preparados para cuando se nos necesite”.
Hernández quiso destacar hoy a todos los condecorados, dar la bienvenida a tres nuevos legionarios de honor, por su cariño y apoyo a la Legión, los cuales, han asumido los valores del credo legionario.
También recordó que, en un día como hoy, se celebra los 99 años de la acción de Tizzi Azza. Un acto de heroísmo que, “nunca debemos olvidar”, en el que el teniente coronel Valenzuela, alcanzó gloriosa muerte y demostró que:
“Nuestra raza, la raza de los legionarios, no ha muerto aún; a él, junto a nuestros héroes, los encomendamos al Cristo de La Buena Muerte mediante la intercesión de nuestro héroe y santo páter legionario Fernando Huidobro”.