El pasaje del terror joven

Desde Jóvenes de Comisiones Obreras, aprovechamos la noche de Halloween para reivindicar y visibilizar algunas cuestiones prioritarias y fundamentales para la juventud. Este año, relacionamos estas con las películas más míticas de la historia del terror en un pasaje repleto de nuestras peores pesadillas.

En primer lugar, La purga nos acompaña para reivindicar el fin de la cultura de la meritocracia. La correlación entre esfuerzo y logros nunca ha sido una realidad social. No todos y todas nos encontramos en el mismo punto de partida por las inmensas lacras que generan las desigualdades.

Por otra parte, El resplandor y su personaje estrella son el reflejo de lo que supone para nuestra juventud la subida de los precios de los servicios básicos asegurados, supuestamente, por nuestro Estado de Bienestar. En este caso hacemos referencia al incremento de los precios de la luz y la importancia de la creación de una empresa pública de electricidad.

La pesadilla antes de Navidad llega por adelantado con el Black Friday, esa muestra de que el capitalismo y su sobreproducción provoca una gran precariedad laboral en el sector del comercio, así como la contratación temporal y las horas extras no remuneradas, sin olvidar las consecuencias medioambientales y el abuso hacia los países en situación de pobreza.

Finalmente, Scream es la clara representación de lo que suponen las prácticas no remuneradas. Horas de trabajo y un abuso constante por la inexperiencia y la desesperación por la búsqueda de una estabilidad económica. No podemos olvidar que esto también provoca la tardía cotización de las personas más jóvenes, conllevando así un problema estructural y una falta de oportunidades visible en todos los aspectos.

Es importante recordar que todos estos problemas pueden tener múltiples soluciones que reivindicamos desde el equipo de Jóvenes de Comisiones Obreras, por lo que ofrecemos a todos y todas, nuestra organización como un lugar donde participar activamente en la lucha por una sociedad libre de desigualdad y un empleo libre de precariedad.

¡Juntos pasaremos menos miedo!