Cómo evitar problemas con vecinos alemanes
Wuppertal (Alemania). Serial: “Un español en Alemania” cap. nº 199
Españoles que viven en Alemania y cuentan en el grupo de WhatsApp lo estrictos que son los vecinos en Alemania: “La peor pesadilla de cualquier migrante en Alemania”. Gracias a las redes sociales, podemos ser testigos de las divertidas quejas que hacen algunos vecinos alemanes a españoles, a sus iguales, cuando ocurre algo que perturba la paz del edificio. La cuenta de WhatsApp españoles en Alemania recoge cada día las anécdotas más curiosas en materia de conflictos vecinales.
Juan José Román, un joven extremeño que vive en Hattingen Alemania nos cuenta lo estrictos que son los vecinos de este país en cuanto a las horas de descanso y los “ruidos molestos”. A través de su cuenta en WhatsApp manifestó a “Un español en Alemania” que los ciudadanos alemanes pueden ser una verdadera “pesadilla” en cuanto en el aspecto convivencia.
La vida en comunidad no es fácil, y más difícil siendo migrante en Alemania, pero no tiene porqué ser imposible. Si te cuesta la convivencia con los vecinos alemanes, aquí tenemos algunos consejos para evitar conflictos y solucionar problemas existentes.
Ruidos molestos
Golpes, gritos, ruidos de la televisión. Los ruidos molestos son uno de los problemas más recurrentes entre vecinos. Si vives en un edificio, es muy probable que te hayas topado con este inconveniente alguna vez en tu vida un problema de cualquier parte del mundo.
El primer paso para la resolución de este conflicto es el diálogo. Si te molestan los ruidos que hace un vecino, comunícaselo en el momento. Será más difícil hacerlo cuanto más tiempo dejes pasar. Lo más probable es que baje el volumen y sea menos molesto. Si no sabes de dónde viene el ruido, puedes probar dejando una nota amable en el ascensor.
Si, por el contrario, la queja de ruidos molestos es hacia tí, tendrás que bajar el volumen. La instalación de paneles acústicos puede ser de ayuda. Algunas opciones son muy estéticas y evitarán que el ruido salga de tu casa y que ingresen otros sonidos.
Cordialidad y convivencialidad
Cuando llegues al vecindario, preséntate ante los vecinos alemanes. Este consejo es especialmente importante si vives en una finca con pocas personas. Cuando vayas cruzándote con ellos en la entrada y salida del edificio, coméntales que te mudaste recientemente. Salúdalos y conócelos. Pueden parecer personas lejanas, pero son los primeros en darnos una mano en una situación de emergencia.
Cuando estés pensando hacer una actividad que pueda afectarles, como una reparación o una fiesta, es buena idea comunicarles antes de que empiece. Saber de antemano les permite hacer planes o contarte cómo les afecta tu proyecto. Probablemente se quejen pero al menos sentirán que fueron tenidos en cuenta y la mayoría de ellos entenderá tu punto de vista.
Mantener la calma y saber cuándo buscar ayuda
Si un vecino se acerca para comentarte un problema que tú ocasionas, escúchalo con atención y agradece por la información. No hace falta reaccionar a la defensiva, aún si estás en desacuerdo. Intenta ponerte en su lugar y buscar una solución conjunta al problema.
La ira y el enojo no ayudarán en nada. Por eso, intenta desescalar el conflicto y buscar una solución que sirva para ambos. Si tu vecino intenta maltratarte o hacerte daño, considera buscar un mediador como el administrador del edificio o llamar a la policía frente a una situación violenta, muchas veces los vecinos alemanes tienen abuso de poder, simplemente el típico tópico "el migrante no acata las leyes, vienen a robar el trabajo, no quitan las cacas del perro, típicos tópicos.
Vecinos en Alemania
La peor pesadilla de cualquier migrante. El mío en Hattingen se enfurruña muchísimo porque a veces hacía videollamadas con mi familia y amigos en España y hablaba en mi propia casa después de las diez″, nos explica.
“A una amiga le pidieron que no use la licuadora los domingos”, agregó Javier Marquez de Burgos junto a una fotografía de una nota escrita a mano. Dicha nota era por otro reclamo similar donde otro vecino alemán avisaba que llamaría a la Policía si no dejaban de caminar descalzos en el horario de descanso, que va de diez de la noche a seis de la mañana.
Voces a favor y en contra de los vecinos alemanes
Pero el debate ya está instalado. En los comentarios, muchos usuarios comentaron que ellos y personas conocidas habían tenido experiencias similares con los Alemanes.
“A un amigo lo hicieron mudar, porque caminaba por el apartamento después de las diez y era la hora en la que llegaba de su trabajo”, comentó Paulo Albarrán de Ávila España
“En un tren de Wuppertal a Dusserdorf me encontré de casualidad un amigo de Galicia, empezamos los dos a darnos abrazos y gritos. A los dos minutos vinieron a reprimir la circunstancia”, reitera en el grupo de WhatsApp españoles en Alemania Pedro Argüelles de Castellón.
Otros consideraron que los migrantes deben adaptarse a las costumbres de los países a los que llegan por respeto a la cultura y a las personas de ese lugar. “Adaptate o te va a salir caro”, expresó Rolando Figueras, quien afirmó que jamás tuvo un problema en 20 años.
Pautas de comportamiento en Alemania
Cada país tiene sus particularidades y las personas que lo habitan también. Quizás sea una buena idea saber cómo “comportarse” para poder llevar una mejor experiencia.
En el sitio Deutschland página de facebook compartieron una lista de nueve cosas que no siempre caen bien a los alemanes y que es bueno saber.
1-Llegar tarde: las citas, los horarios de medios de transporte e incluso los trenes autobuses, tienen en Alemania el valor de juramentos.
2-Hacer ruido: en Alemania el ruido está sujeto a horarios de servicio. Entre las diez horas y las siete de la mañana, al mediodía o los domingos y días festivos es considerado un asocial.
3-Visitas espontáneas: nunca visites a nadie en Alemania sin haberle avisado antes.
4-Cruzar con el semáforo en rojo incluso si no se ve venir ningún coche.
5-Llamar tarde: A partir de las ocho horas se consideran una perturbación.
6-No separar la basura: Alemania es líder mundial en reciclaje.
7-Brindar sin contacto visual: un brindis cruzado está considerado un mal augurio.
8-Estacionar en la bicisenda o carril bici.
9-Charlas superficiales: siempre se va directamente al grano.