13 motivos por los que no votaré a Juan Vivas
Las elecciones municipales son distintas a otros comicios. En estas votaciones elegimos a los políticos de casa que conocemos directamente y en los que evaluamos su gestión día a día.
Ya no votamos partidos, programas, entelequias ni ideas platónicas; decidimos y evaluamos qué ha sucedido en nuestra Ciudad durante la última legislatura.
La política municipal es la que más se acerca al pueblo y es por ello el motivo principal por lo que los ceutíes debemos ejercer el compromiso democrático de decidir no una ideología sino una gestión.
Yo no votaré a Juan Vivas por las siguientes 13 razones que quiero compartir con mis vecinos.
1°- El derroche del Ayuntamiento en el proyecto faraónico de la calle real. Ceuta no es una calle sino un pueblo con necesidades mucho más urgentes.
2°. La nefasta gestión de los planes de empleo. Un dinero despilfarrado patéticamente por no planificar cuáles son las necesidades de la ciudad.
3°- El Parque de Santa Catalina convertido en un erial: todo lo plantado está más muerto que nuestros difuntos del cementerio... ¿Cómo es posible no tener en cuenta la climatología y el terreno? ¿Quién es el responsable?
4°- Las desigualdades entre las barriadas. ¿Hay ciudadanos de primera y de segunda?
5°- La millonaria inversión en plantas por la Ciudad que quitan y ponen en un antojo muy complicado de entender.
6°- El peligro que sufrimos los viandantes por el firme de nuestras calles. Que levante la mano el que no se haya caído alguna vez a causa de un suelo que parece la pista de patinaje artístico.
7°- El descuido de los montes, en muchas ocasiones llenos de basuras y escombros. ¿No existen brigadas municipales para evitarlo?
8°- El descontrol municipal respecto a las construcciones ilegales. ¿Qué sucede con las obras sin licencia? ¿Estamos en una selva urbanística descontrolada.
9°- La situación de los Mena, olvidados por los que tienen la obligación de tutorizarlos: drogados, campando por el puerto intentando convertirse en polizones a riesgo de perder la vida, causando una sensación de inseguridad propiciada por sus circunstancias.
10°- El paulatino cierre de los mercados de abastos. Los puestos ya van echando la persiana definitivamente. Solo tenemos que ir al mercado y hablar con los trabajadores. El Ayuntamiento ha programado una muerte lenta de este comercio. Las promesas de reforma y revitalización son cantos de sirena. Ya no nos creemos el engaño de los vendedores de crecepelo del Consistorio.
11°. Los comerciantes de los salazones siguen vendiendo sus productos en chiringuitos impropios y nada acondicionados. ¿No entiende nuestros políticos que estos artesanos y los productos que manufacturan forman parte de las señas de identidad de nuestra historia?
12°- Juan Vivas anunció que dejaba la política hace un año. Ya lleva 16 como presidente de la ciudad. ¿No parece más saludable para la democracia el relevo de los dirigentes? ¿Por qué se abraza el poder secula seculorum como si fuera un oficio más que un servicio.
Y la razón número 13. No conozco personalmente a Juan Vivas. Sé de su cariño por y para la ciudad y que en su ánimo esta conseguir todas las mejoras para el pueblo; por eso creo que él no se va a votar a sí mismo. Sería un gesto que lo honraría pedir a sus conciudadanos que no lo votaran.