17 de septiembre: Teatro, “Decadencia”
La Consejería de Cultura pone a la venta las entradas el martes, día 16, para la obra de teatro ‘Decadencia’, dirigida por Pedro Casablanc, la cual se representará el 17 de septiembre, a las siete y media de la tarde.
Las localidades podrán adquirirse en la taquilla del teatro, como en la web de la Ciudad, a precios de: 12 euros patio de butacas, 10 platea y 5 visibilidad reducida. A excepción de esta última, habrá descuentos de 2 euros para los usuarios del carné joven, tercera edad y familias numerosas.
Queremos puntualizar que, visibilidad reducida no es para personas con problemas de visión, sino que, es lo más alto del teatro y según des altura en la primera fila, la barandilla te ciega el escenario. Es lo que, se llama contraplatea o antiguamente en lenguaje coloquial: gallinero. Un auditorio con muy buena sonoridad, con un diseño moderno incómodo e incorrecto.
‘Decadencia’
Según su autor, Steven Berkoff, “Decadencia" es una descarnada sátira de las clases pudientes de cualquier nacionalidad.
Protagonizada por los intérpretes Maru Valdivielso (aristócrata) y Pedro Casablanc (vividor), en su adaptación por Benjamín Prado, la describe como una obra crítica, tiene ironía aguda y
malintencionada, “caústica, provocadora, que persigue al público, lo acorrala y a menudo le obliga a reír para no llorar”.
‘Decadencia’, una obra que, en palabras de su adaptador, relata la historia de dos parejas formadas por tres aristócratas y un vividor, el que, aspira a sacar provecho de sus debilidades. Desalmados, clasistas, racistas, hipócritas, frívolos, depredadores, decadentes sin principios ni límites. Una sociedad decadente nihilista que, va perdiendo la fuerza o los valores que la constituyen y se debilita hasta desintegrarse.
Pedro Casablanc con esta historia provocadora que fluye al ritmo de swing y que se apoya en la interpretación de un texto hilarante que pinza y punza, que hiela la risa y ríe lo serio.
90 minutos de “Decadencia” según Benjamín Prado
Dos parejas formadas por tres aristócratas y un vividor que actúan como depredadores, sin principios ni límites, aunque su miedo es que los miserables a quienes desprecian se junten y los ataquen.
Son sarcásticos, irónicos, grotescos, peligrosos e infelices, están pese a sus lujos, ni su lujuria los llenan. No creen en el amor y cuando forman parejas no lo hacen porque se quieran, sino porque se necesitan; no se seducen, se cazan; no se dan, se ponen precio; no se entregan, se venden, transforman sus cuerpos en una mercancía y sólo llegan al placer a través del dolor, el abuso y la humillación. Y a la hora de vengar una infidelidad, no descartan ni desplumar al traidor ni cometer un crimen…
El londinense Steven Berkhoff, de padres rusos, es un mago del humor negro y esta obra un espejo y una radiografía de lo que ocultan nuestra sociedad de puertas para dentro y las enfermedades morales que padecemos.