Redondo: “Vivas vuelve a repartir dinero público para silenciar su nefasta gestión”
Solidaridad critica el “nuevo despilfarro” del Gobierno, que gasta 200.000 euros “para empezar supuestamente a dialogar” con los sindicatos.
Solidaridad advierte que:
“La Mesa de Diálogo Social formada por Gobierno, patronal y sindicatos no es más que una nueva estafa de Vivas para repartir 200.000 euros de subvención a sindicatos y patronal”.
Lo “curioso”, alerta Solidaridad, es que “tras años sin diálogo” entre sindicatos y Gobierno la mesa se constituya “previa liberación de una partida de 200.000 euros”. Los propios medios de comunicación han señalado cómo el Gobierno modificó el presupuesto de 2021 para incorporar una partida de 200.000 euros que justificó como “una forma de fomentar la participación institucional de los agentes sociales.
Sin embargo, critica el sindicato, no se conoce si el pago de esta subvención que:
“Se repartirán a partes iguales UGT, CCOO, la Cámara y la CECE será a través de un convenio ni qué obligaciones conlleva”. Para Solidaridad este gasto supone “un auténtico despilfarro y una burla a todos los ceutíes en estos momentos de crisis por el cierre fronterizo y por la pandemia”.
Juan Sergio Redondo, coordinador territorial de Solidaridad en Ceuta, se pasma al pensar que doscientos mil euros “para empezar a dialogar sobre sobre qué, porque ni lo han explicado”. Para Redondo, es un “reparto de dinero tapar las críticas de la nefasta gestión política de un Gobierno, cada día más endeudado, con una crisis económica brutal y con los índices de paro más elevado de toda España”, señala.
El coordinador territorial subraya que:
“Este es un ejemplo más de cómo el Ejecutivo suele tratar los asuntos que afectan a los ceutíes, usando el dinero del contribuyente para subvencionar comisiones que le permitan dar la sensación de que se hace algo para, a continuación, no hacer absolutamente nada. Compran voluntades y siguen regando esa red clientelar que tantos beneficios políticos le ha supuesto, no solo al Gobierno del Partido Popular, sino también a esos poderes fácticos y económicos que entre bambalinas manejan la política local desde hace décadas”.