El traslado del Medinaceli dentro de su brillantez no ha tenido la acogida esperada

No ha sido la acogida esperada este año en el traslado del Señor de Ceuta, posiblemente por el cambio de fecha que abre la Semana Blanca. Cientos de devotos se han desplazado hasta la Iglesia de san Ildefonso, en el barrio de El Príncipe, para acompañar el Cristo de Medinaceli y su Madre en su traslado a su casa de hermandad, ubicada en la avenida España (Glorieta del Medinaceli).

El Cristo de Medinaceli de Ceuta volvió a cumplir con una de las tradiciones más arraigadas de la Semana Santa caballa, como es la liberación de un preso. Este año, el acto de la liberación volvió a tener lugar en el acuartelamiento de González Tablas. El preso liberado fue un ceutí de 28 años de edad que cumplía una condena de cuatro años y ciento siete días de prisión.

La directora del Centro Penitenciario de Ceuta, ha declarado en el acto de liberación que el interno, ha sido propuesto tras mantener una trayectoria responsable e implicada durante su estancia en prisión, participando de manera satisfactoria en las tareas y programas propuestas desde el Área de Tratamiento.

JBG, durante el cumplimiento de su condena ha residido en el módulo de enfermería, donde ha ejercido sus funciones como interno de apoyo con un total de 27 internos residentes en dicho Departamento (población interna con enfermedad mental, con patologías incapacitantes físicamente o intelectualmente).

A partir del momento de su liberación, la “Venerable Hermandad de Penitencia y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús Cautivo y Rescatado y María Santísima de los Dolores” ejercerá la tutela del liberado, durante el tiempo que permanezca en libertad condicional y hasta su puesta en libertad, la que, estaba prevista para el próximo año en la misma fecha.

El Medinaceli y su Madre, María Santísima de los Dolores, 'La Lola', como la llaman cariñosamente en la hermandad, este año fue llevada en andas por costaleros y costaleras, y al salir de la iglesia se encontraron con cientos de fieles, devotos y promesas, visiblemente emocionados.

Durante el recorrido se fueron sumando más gente al traslado, los cuales acompañaron a los titulares de la hermandad hasta su Casa.

Igual que cada año, acompañaron al traslado de los titulares distintas comitivas de la ciudad, encabezada por el Gobierno local, autoridades civiles, militares y religiosas, entre estas el presidente de la Ciudad, Juan Vivas; la delegada del Gobierno en Ceuta, Cristina Pérez; el comandante general de Ceuta, Marcos Yago; el presidente de la Autoridad Portuaria, Juan Manuel Doncel; la directora del Centro Penitenciario ‘Fuerte de Mendizábal’, Nonia María Velázquez y el presidente de la Real Federación de Fútbol de Ceuta, Antonio Gaona.

La representación religiosa estuvo encabezada por el obispo de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza; el vicario general de Ceuta, Francisco Jesús Fernández Alcedo; el secretario del Consejo de Hermandades y Cofradías de Ceuta, Francisco Moreno Lechuga; el hermano mayor de la Cofradía del Medinaceli, Juan José Carnero. En esta ocasión el presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de Ceuta, Jesús Juan Bollit, ha estado de tertuliano en la televisión publica de Ceuta.

Presentes en el acompañamiento de las parihuelas también se encontraban numerosos consejeros del Gobierno local, entre ellos el vicepresidente de la Ciudad, Alejandro Ramírez; la consejera de Cultura, Pilar Orozco, acompañada por su asesora delegada, Adela Nieto y otros diputados “católicos”.

El recorrido, fue realizado sin incidencia ninguna, gracias a la numerosa presencia de los agentes del CNP y Policía Local, que mantuvieron el orden y regularon el tráfico durante todo el recorrido, el cual estuvo marcado por la niebla.

Las parihuelas hicieron su alto en la Cofradía de la Pollinica, donde recibieron de la Junta de Gobierno, sendos ramos de flores a cada uno de los titulares. Como sabemos “La Encricijada”, su sede la iglesia de san José está en reparación y salen en penitencia desde la catedral.

A las nueve de la noche, el Señor de Ceuta y su Madre llegaban a su Casa. Tras la revirada al sonido de una saeta, los titulares quedaban recogidos hasta el próximo día 25, Lunes Santo, donde realizarán su estación de penitencia.

Recordemos que el Medinaceli, procesionaba el Jueves Santo. El Lunes Santo quedaba “vacío” en la Semana Mayor ceutí y se cubría con el traslado, por ello, se decidió pasarlo para el sábado el lunes procesionar, y así fue, por decisión de la Junta de Gobierno del Medinaceli, con la venia del Consejo de Hermandades y Cofradías.

Esta es la "principal" razón de peso, pero hay varias más, entre ellas, el Señor de Ceuta alcanzaría más majestuosidad al recorrer solo la carrera oficial, y de poder tener a disposición la banda y música de Ceuta, aparte de más disponibilidad de costaleros, no para esta Cofradía, sino para las del Jueves Santo y Viernes Santo, las cuales, se ven afectadas por las vacaciones.