Lactaceuta recuerda que la vacunación en madres lactantes es compatible y segura
La vacunación no puede ser, de forma totalmente injustificada, un motivo más para interrumpir la lactancia.
La asociación Lactaceuta, ante las quejas recibidas por numerosas madres que han sido llamadas para ser vacunadas, pero excluidas del proceso por su situación de lactantes, informa de que la vacunación no está desaconsejada y, además, es considerada como segura y compatible. Igualmente hace hincapié en que suspender la lactancia materna para administrar la vacuna pone en riesgo la salud tanto de la madre y como del lactante.
La OMS y otros, exponen que el no haber incluido a madres lactantes en los ensayos clínicos, aclaran que las vacunas utilizadas hasta ahora han demostrado ser seguras para estos colectivos e inciden en que, los anticuerpos maternos generados por las vacunaciones tienen el potencial de proteger al lactante.
Por otro lado, las vacunas autorizadas en España están basadas en RNAm, que no contienen virus vivos y por lo tanto no tienen capacidad infectiva, siendo seguras para la lactancia. El Ministerio de Sanidad, sobre la estrategia de vacunación, incluye la pregunta sobre el suministro en caso de lactancia y la respuesta es clara: "no se considera que suponga un riesgo para el lactante (...) no sería necesario suspender la lactancia durante los días posteriores a la vacunación".
La plataforma e-lactancia, desarrollada por pediatras y farmacéuticos, califica la vacuna como de riesgo muy bajo, es decir, “seguro, compatible y con mínimo riesgo” para la lactancia y el lactante.
Además, desde Lactaceuta se insiste en que abandonar la lactancia por estas causas puede ser peligroso. Se perderían todos los beneficios que amamantar aporta tanto al bebé como a la madre, que son innumerables. La vacunación no puede ser, de forma injustificada, un motivo más para interrumpir la lactancia.
Desde Lactaceuta inciden en que la vacunación frente a la COVID-19 en madres que amamantan es segura y compatible, no existe ninguna justificación ni evidencia científica, que aconseje suspender o no iniciar la lactancia materna como condición para administrar la vacuna. De hecho, las pruebas realizadas con leche materna de madres vacunadas apuntan a la existencia de una mayor protección para el lactante y resaltan, el gran potencial positivo de la leche materna y del proceso de amamantar.