Díaz Ayuso, cuatro años cobrando 4.000 euros mensuales de un ‘chiringuito’ de Esperanza Aguirre relacionado en Gürtel, Lezo y Púnica
Los próximos días 13 y 14 de agosto, la Asamblea de Madrid celebra por segunda vez la sesión de investidura para elegir a la próxima presidenta de la Comunidad de Madrid. En la primera ocasión, el presidente de la cámara regional decidió no proponer a ningún candidato al considerar que nadie contaba con los apoyos necesarios para alcanzar la mayoría necesaria. El candidato del PSOE, Ángel Gabilondo solicitó al presidente de la Mesa, que era su intención de presentarse, como partido ganador de las elecciones, no obstante, Juan Trinidad, rechazó su petición y la candidatura quedó desierta.
Ahora sí habrá candidata, será la líder del Partido Popular, Isabel Díaz Ayuso, gracias al apoyo de Ciudadanos, partido con el que se ha firmado un Gobierno de Coalición por el que Ignacio Aguado será vicepresidente regional. Y también tendrá los votos de la ultraderecha de Vox que, según dicen, después ejercerán la oposición al nuevo Ejecutivo bipartito.
Estos días, se está conociendo el pasado de la que será la máxima mandataria de la Comunidad de Madrid y los hechos demuestran que proviene de la cantera del PP, esa que se ha ‘criado’ al albur de la sofisticada y extensa red construida por el PP durante más de dos décadas controlando las instituciones regionales.
Precisamente este jueves el diario El País, publica la ‘experiencia laboral’ de Díaz Ayuso entre los años 2008 y 2011. Entonces una joven periodista vinculada a Nuevas Generaciones del Partido Popular, comenzó a trabajar en Madrid Network, una entidad público-privada creada por Esperanza Aguirre para impulsar proyectos de innovación. Lo cierto es que la mayor parte de las ayudas a empresas que salieron de Madrid Network fueron a parar a proyectos que fracasaron y muchos de ellos estaban vinculados a empresas de altos cargos del PP. La gestión, por tanto, fue desastrosa y millones de euros de dinero público se fueron por la alcantarilla.
Pero este ‘chiringuito’, como luego los propios dirigentes del PP se refirieron a este tipo de entidades, también servía para colocar a numerosas personas que trabajaban para la formación y que se embolsaban sueldos que superan los 50.000 euros anuales. Y todo sin ningún control.
En el caso de Ayuso, fue contratada como asesora, trabajo por el que percibía 4.219 euros netos mensuales. Paralelamente a su asesoría en Madrid Network era la encargada de la cuenta de Twitter de Esperanza Aguirre y la comunicación online del partido en la capital de España.
El currículum de la propia Ayuso señala que estos años trabajó “en departamentos de comunicación de varias empresas y fundaciones” sin dar más explicaciones. Dos años antes, en 2006, la dirigente popular fue nombrada asesora de la Consejería de Justicia y después de Presidencia, con Esperanza Aguirre como presidenta autonómica. Y a continuación pasó ya a Madrid Network donde permaneció cuatro años, hasta que entró como diputada de la Asamblea de Madrid. Por tanto, la que será presidenta lleva más de una década ‘viviendo’ y ‘trabajando’ del erario público.
Ahora, Díaz Ayuso reniega de sus antecesoras. Ante la petición de imputación de Aguirre por parte de la fiscalía anticorrupción, afirma que su relación con ella es la de “cualquier militante o afiliado del PP durante las épocas en las que han sido presidentas”.
MÁS SOSPECHAS SOBRE DÍAZ AYUSO
El caso de Madrid Network en la que Díaz Ayuso trabajó con una remuneración muy sospechosa por su cantidad no es el único del que Díaz Ayuso debería dar alguna explicación. Estos días se ha sabido también que Díaz Ayuso podría estar implicada en un presunto caso de alzamiento de bienes de Avalmadrid. Más Madrid ya ha pedido a Antocorrupción que investigue el asunto. Tras entrar como diputada en la cámara regional, Ayuso hizo llamadas con la entidad para aclarar un polémico aval adjudicado a la empresa de su padre. MC Infortécnica, de la que su progenitor tenía un 25% había obtenido 400.000 euros con el aval de una nave de su padre y del patrimonio del resto de socios. Ayuso quería saber cómo estaba la operación y si el patrimonio de su padre corría peligro ya que el dinero, finalmente, nunca se devolvió. En ese tiempo, la propia Díaz Ayuso aceptó la donación de un piso familiar para ponerlo a salvo de posibles embargos. Desde Avalmadrid le comentaron a Ayuso que el dinero concedido tenía “nueve avalistas solidarios”. Pero cuando se quiso recuperar el dinero, las propiedades del padre de Ayuso ya no figuraban en el informe.
Los asuntos de sus empresas no se acaban aquí. El diario digital Infolibre cuenta que una empresa participada por Ayuso, Sismédica, S.L. dejó de pagar el IBI al Ayuntamiento de Madrid durante los años 2013-2017. Díaz Ayuso tiene el 50% de las acciones de esta sociedad, que pertenecía a su padre, y que entre sus propiedades consta un local de oficinas de 180 metros cuadrados en la calle Antonio López de Madrid. Este local fue el que eludió el pago del IBI.
Díaz Ayuso recibió, por tanto, las empresas de su padre y al menos un piso cuando se progenitor comenzó a tener problemas económicos. La ley establece que estas prácticas podrían ser constitutivas del delito de alzamiento de bienes para que los acreedores no puedan recuperar sus deudas.