Los educadores sociales denuncian el intrusismo
Este colectivo observan cómo se implementa el grado de Educación Social en la UGR sin ofrecer salidas profesionales y sin convocar bolsas de trabajo.
Los educadores sociales piensan denunciar e impugnar la bolsa de trabajo de educadores que ha salido en la ciudad. Indignación es lo que sienten al presenciar tanta pasividad por parte de la misma.
Los educadores sociales llevan años reivindicando que se les reconozca la profesión del educador social, es más, hace unos cuantos años se llevó a cabo una propuesta de regularización de la profesión del educador social donde se comprometía la ciudad, “por lo visto se han olvidado”, afirman.
Este colectivo observan cómo se implementa el grado de Educación Social en la UGR sin ofrecer salidas profesionales y sin convocar bolsas de trabajo para dicha profesión. “Observamos un claro ejemplo de intrusismo tanto en centros de menores como en otras entidades y ante toda esta caótica situación la ciudad no se pronuncia”, dice el colectivo de Educadores Sociales de Ceuta.
Ante todo esto –los educadores- se sienten indignados y disconformes con la situación existente, se encuentran en una situación de desamparo por parte de la Ciudad Autónoma de Ceuta, ya que llevan años sin convocar bolsas de trabajo y cuando lo hacen, la figura del educador social se ve substituida y pueden optar a dichas bases cualquier profesión, siendo éstas unas funciones propias y definidas de los educadores sociales.
El educador social
El educador social es clave para dar apoyo y respuesta a personas en riesgo de exclusión social donde tiene cabida en el ámbito de los servicios socioeducativos para la familia, la infancia, la juventud y mayores, siendo un agente social y mediador.
El educador social se ocupa de la atención y prevención de situaciones de exclusión social, donde su intervención está presente ante el fracaso escolar, el absentismo, la delincuencia, el fenómeno de la inmigración…
Con todo esto, concluye el colectivo, lo que “queremos manifestar es que nuestra presencia es de vital importancia en una ciudad donde fluye esta problemática y que ante el intrusismo presente y la pasividad del Gobierno no nos vamos a quedar con los brazos cruzados”.