"Los Regulares saben que mueren por España, y no quieren saber más"
Con la imposición de la Corbata de la ‘Operación Balmis’ al guion del Grupo de Regulares de Ceuta Nº 54 por el jefe del Mando de Canarias.
El jueves 30 de junio, a las ocho de la tarde, se ha desarrollado en el acuartelamiento “González Tablas”, el acto militar dentro del programa de actividades con ocasión del CXI Aniversario de la Creación de las Fuerzas Regulares.
Organizado por el Grupo de Regulares de Ceuta Nº 54, ha presidido el jefe del Mando de Canarias, Alejandro Escámez Fernández, al que han acompañado el presidente de la Ciudad, Juan Vivas Lara, el comandante general de Ceuta, Marcos Llago Navarro y el coronel Agregado de Defensa del Ecuador en España, aparte de los jefes de las unidades de la COMGECEU, otras autoridades civiles y militares, y otras personas relevantes de distintos ámbitos de la sociedad ceutí.
La formación, compuesta por la Escuadra de Gastadores del Grupo de Regulares de Ceuta Nº 54, su Mando y Plana Mayor de Mando, su Nuba de Guerra, la Unidad de Música del Batallón de Cuartel General de la Comandancia General de Ceuta, la Escuadra de Gastadores del Tabor “Tetuán” I/54, su Mando y Plana Mayor y sus cinco compañías, ha sido mandada por el coronel jefe del Grupo, José Moro Sanjuán.
Durante el acto se ha leído la efeméride, consistente en un extracto de la Real Orden circular de 30 de junio de 1911 que, el entonces ministro de la Guerra, Agustín Luque, dirigió al Estado Mayor Central del Ejército creando así las Fuerzas Regulares.
Seguidamente se ha impuesto la corbata de la Operación Balmis al guion del Grupo de Regulares de Ceuta Nº 54, también, se han impuesto varias condecoraciones y se han nombrado a dos nuevos “Regulares de Honor” y a varios regulares con el "Regular Distinguido".
Tras la alocución del Coronel Jefe del Grupo, ha tenido lugar el acto de homenaje a los que dieron su vida por España, finalizado este se ha entonado el Himno de Regulares, finalizado con el desfile de la fuerza.
Alocución del coronel José Moro Sanjuan
Y los Regulares van y vienen a donde les mandan, y luchan aquí, y mueren allá, y nunca preguntaron por qué mueren. Saben que mueren por España, y no quieren saber más. (ABC de 26 de mayo de 1923)
Así comenzó su alocución el coronel José Moro Sanjuan, pasando a darle la enhorabuena a todos los que han sido recompensados, incluidos los nuevos Regulares de Honor, Raquel, que donó el original de una fotografía de su propiedad para el museo, correspondiente al día de la boda del teniente coronel Dámaso Berenguer Fusté, fundador de Regulares y, al coronel José Joaquín Miláns, por la difusión de la Cultura de Defensa en general, y de Regulares en particular, plasmándola con obras de fotografía artística.
Moro explica que el rey Alfonso XIII, los bautizaría con el sobrenombre de “Mis Fieles Regulares”. Para comentar como se desarrolló la creación de las Fuerzas Regulares. Unidad de extrema vanguardia.
Asimismo, el coronel repaso el PGA de la unidad, maniobras, ejercicios de disponibilidad, presentación de revistas, paradas militares, competiciones deportivas, misiones en el extranjero, acciones de cooperación con la sociedad civil y unas cuantas acciones meritorias de ayuda a otros conciudadanos, incluso salvándoles la vida.
A continuación, el coronel, dio un repaso por la historia y las efemérides del Grupo, recordando que es la unidad más recompensada de nuestras FAS y señalando que, el próximo 3 de julio, se cumplirán cien años desde que Alfonso XIII concediese al Grupo el derecho a usar bandera, la que, fue donada por la ciudad de Tetuán.
En el año 2000, tras una serie de reorganizaciones, se recuperó la denominación de Grupo sustituyendo a la de Regimiento. Bandera donada por el pueblo de Ceuta, amadrinada por María Dolores Puya, esposa del presidente de la Ciudad.
Moro despidió con cariño al cabo primero José Gutiérrez Hernández, que pasa a la reserva tras más de cuarenta años de servicio, todos ellos el Grupo, siendo probablemente el que más tiempo haya servido en las Fuerzas Regulares.
Alférez Suárez Veintimilla
Por la mañana se realizaron los actos de homenaje al alférez Suárez Veintimilla de nacionalidad ecuatoriana, en el Panteón de los Héroes de Regulares del Cementerio de Santa Catalina, donde reposan sus restos mortales, al que asistió el coronel Agregado de Defensa del Ecuador en España.
El pasado 19 de junio se cumplieron cien años de su muerte en combate. Este alférez, tras haber cursado sus estudios en la Academia de Caballería de Valladolid comisionado por su país, realizaba sus prácticas en calidad de agregado formando parte del Tabor de Caballería del Grupo de Fuerzas Regulares Indígenas de Ceuta nº 3. En la jornada del 19 de junio de 1922 tuvo lugar un violento ataque a la columna que mandaba el Teniente Coronel Miguel Ponte, en el sector de Beni Arós. Durante el rudo combate, el Alférez Suárez Veintimilla cogió la carabina de su ordenanza muerto y abatió a dos enemigos cayendo también mortalmente herido.
Con apenas 27 años fue considerado por España como héroe nacional y en su tierra natal, Ecuador, se le tiene como uno de los símbolos de la Hispanidad en su máxima expresión, la entrega de la propia vida por España.
Sus palabras en una carta son el mejor testimonio de amor a la madre patria y de llevar hasta la muerte un ideal:
“Yo no puedo creerme extranjero en España. Mi patria es mi Ecuador amado y lo será mientras viva, pero España me ha dado un uniforme que tengo que honrar y para mí, como debe ser para todos los americanos, España, aunque no sea mi patria, merece todo el cariño, porque es la madre de mi país natal”.
Actualmente más de una decena de mujeres y hombres con doble nacionalidad, ecuatoriana y española, forman en las filas del Grupo de Regulares.