La Pascua Militar, instaurada por el Rey Carlos III en 1782, se ha celebrado un acto militar presidido por el comandante general de Ceuta, Marcos Llago Navarro, en representación del rey Felipe VI.
Se ha llevado a cabo una parada militar en la plaza de África, por una unidad de honores al mando de un capitán del Tercio Duque de Alba 2º de la Legión, conformada por su bandera, escuadra de gastadores, banda de guerra, una compañía de la IV Bandera y la Unidad de Música del Batallón de Cuartel General de la COMGECEU.
A continuación, en el Salón del Trono del establecimiento Foso Almina, sede del Cuartel General de la Comandancia General de Ceuta, ha tenido lugar una recepción oficial en la que, además de la lectura de la reseña histórica sobre la Pascua Militar e imposición de condecoraciones, el comandante general ha dirigido unas palabras en las que se ha hecho un balance de las vicisitudes del año recién terminado y, se han marcado las líneas de acción para el que comienza.
Al COMGE y al segundo jefe, Fernando Rocha, le han acompañado el presidente accidental de la Ciudad, Alejandro Ramírez, acompañado de las consejeras Kissy Chandiramani, Pilar Orozco y Nabila Benzina, con el director general de Presidencia, Pablo García.
En representación del Estado, el jefe de Gabinete y anterior delegado del Gobierno, Rafael García. Por Defensa su delegado, el Comandante Naval, el jefe Interino de la Comandancia de la Guardia Civil, aparte de los jefes de las unidades, centros y organismos de la guarnición ceutí.
El presidente Juan Vivas tuvo ayer (05) ocasión felicitar al comandante general de Ceuta, Marcos Llago, transmitiéndole que:
“Esta conmemoración pone de manifiesto, una vez más, el estrecho vínculo, la fusión, existente entre Ceuta y el Ejército, así como para dejar constancia de nuestro respeto, cariño y admiración a cuantas personas integran esa Comandancia General, cuyo mando ejerces de manera brillante y ejemplar”.
Vivas remató subrayando que:
"El pueblo de Ceuta y nuestras Fuerzas Armadas siempre caminarán juntos por la senda común del amor a España”.
El origen de la Pascua Militar se remonta al siglo XVIII, cuando España bajo el reinado de Carlos III, recupera el 6 de enero de 1782, la isla de Menorca en manos de los ingleses desde 1708. Por ello, el Rey, institucionalizó el reconocimiento de las Fuerzas Armadas a los protagonistas de esa gesta mediante una ceremonia militar que al ser coincidente con la Epifanía la denominó Pascua Militar.
Desde entonces, tradicionalmente, se celebra el 6 de enero de cada año, en el palacio Real de Madrid y en distintos emplazamientos militares de la geografía española. La Pascua Militar ha pasado de ser un recuerdo histórico a un solemne e importante acto castrense con la que se inicia el año militar.