1000 millones de personas padecen algún tipo de trastorno mental en el mundo

La pandemia de la COVID-19 agrava la salud mental de estas personas.

Cerca de 1.000 millones de personas viven en el mundo con un trastorno mental, 3 millones de personas mueren cada año por el consumo nocivo de alcohol y una persona se suicida cada 40 segundos. Y ahora, miles de millones de personas de todo el mundo se han visto afectadas por la pandemia de COVID-19, que está teniendo repercusiones adicionales en la salud mental de las personas.

Mar Echenique, psicóloga del Departamento de Salud de Cruz Roja, indica que:

“Pese a estos indicadores, relativamente pocas personas en todo el mundo tienen acceso a servicios de salud mental de calidad. En los países de ingresos bajos y medios, más del 75% de las personas con trastornos mentales, neurológicos y por consumo de sustancias no reciben ningún tratamiento para su afección. Además, la estigmatización, la discriminación, el carácter punitivo de la legislación y las violaciones de los derechos humanos hacia las personas que sufren enfermedad mental siguen estando a la orden del día”.

El acceso limitado a una atención de salud mental de calidad y asequible en el mundo antes de la pandemia, y en particular en las situaciones de emergencia humanitaria y de conflicto, ha disminuido aún más debido a COVID-19, ya que la pandemia ha perturbado los servicios de salud en todo el mundo.

Las causas principales han sido la infección y el riesgo de infección en centros de atención de larga duración como los centros residenciales y las instituciones psiquiátricas; los obstáculos para reunirse con personas cara a cara; el hecho de que el personal de salud mental esté infectado por el virus; y el cierre de los centros de salud mental para convertirlos en centros de atención para personas con COVID-19.

A este descenso de la atención hay que sumar las consecuencias de la pandemia de COVID-19 en el bienestar mental de las personas de todas las edades, cuyas vidas hayan cambiado considerablemente por la pérdida de seres queridos, el confinamiento, el desempleo, el aislamiento, la soledad no deseada, el miedo, el estrés o la sobrecarga, entre otras.

Cruz Roja ‘Te Escucha’: servicio telefónico gratuito de apoyo psicosocial

Por estos motivos, Cruz Roja puso en marcha el pasado mes de abril el proyecto ‘Te Escucha’, un servicio de atención telefónica gratuita (900 107 917) para ofrecer apoyo y acompañamiento psicosocial a las personas que, por sus circunstancias de enfermedad, soledad, edad avanzada, pérdida de empleo, diversidad funcional o falta de vivienda, entre otras, se vean doblemente afectadas por esta crisis sanitaria. Este servicio se integra en el Plan Cruz Roja RESPONDE frente a la COVID-19, la campaña transversal que Cruz Roja creó el pasado mes de marzo (tras la declaración del Estado de Alarma en nuestro país) para atender a las personas más vulnerables ante la pandemia.

Mar Echenique indica que:

“El objetivo del servicio Cruz Roja ‘Te Escucha’ es ofrecer apoyo y acompañamiento a las personas que se encuentran en situación de mayor fragilidad y vulnerabilidad social, a las que en estos momentos están sufriendo en su propia piel la enfermedad o la pérdida de sus seres más queridos y a las que están interviniendo en primera línea en la lucha contra esta pandemia”.

Progresivamente, el servicio ‘Cruz Roja Te Escucha’ está atendiendo cada vez más a personas que están sufriendo el impacto socioeconómico de la pandemia por COVID-19.

Cruz Roja ‘Te Escucha’ ofrece apoyo tanto a familiares y amistades de personas muy graves o que han fallecido por la enfermedad causada por COVID-19, como a todas las que se encuentran hospitalizadas o aisladas en casa con síntomas graves, y a las personas voluntarias y trabajadoras de Cruz Roja y de otras entidades, que están llevando a cabo una intervención humanitaria sin precedentes.

Desde su creación, el servicio Cruz Roja ‘Te Escucha’ ha realizado ya más de 4.900 atenciones telefónicas a personas que en estos momentos están sufriendo emocionalmente las consecuencias del virus.

Según el último informe de Cruz Roja ‘Te Escucha’, que recoge los datos de atención cuando se cumplen seis meses desde la puesta en marcha del servicio, más del 68% de las llamadas corresponden a mujeres y, respecto a la edad, el 30% de las llamadas son de personas con entre 50 y 64 años (más de 1.500 llamadas), seguida de la franja entre los 40 y los 49 años con un 20% (más de 1000 llamadas).

En cuanto al perfil de las personas que llaman, el 26% del total de las consultas son realizadas por personas en situación de vulnerabilidad y se observa cómo ha ido aumentando el perfil de las personas que han perdido el empleo. Otros colectivos vulnerables que también recurren a Cruz Roja ‘Te Escucha’ son personas mayores y cuidadoras de personas dependientes, personas migrantes y personas enfermas o con discapacidad en situación de aislamiento y soledad.

El 51% de las llamadas recibidas corresponden a personas que utilizan el servicio por primera vez. En cuanto a su relación previa con Cruz Roja, el 49% de las personas manifiesta no tener una relación previa con Cruz Roja, seguida de un 25% que indica ser ya usuaria de Cruz Roja y un 4% pertenece al voluntariado de la Organización.

En cuanto al tipo de consultas que realizan el 28% solicitan información, el 26% manifiestan necesidades no cubiertas y el 24% solicitan contención y soporte emocional por estar viviendo una situación que les desborda.

Respecto al origen de las llamadas recibidas, cabe destacar que el 28% de las llamadas procede de personas que residen en la Comunidad de Madrid, seguido de Andalucía (24%), Comunidad Valenciana (8%) y Galicia (7%).

 La portavoz de Cruz Roja apunta que:

“Con la celebración del Día Mundial de la Salud Mental, desde Cruz Roja queremos llamar la atención de todas las personas en estos tiempos tan difíciles para que todas hagamos algo a favor de la vida y el bienestar, tomando medidas concretas, de carácter individual, que favorezcan nuestra propia salud mental y apoyando a amistades y familiares que se encuentren afectados por un trastorno de este tipo”.

Además, continúa Echenique queriendo incidir en el rol que:

“Todos y todas podemos desempeñar: como empleadores, adoptando medidas para establecer programas de bienestar de los trabajadores y trabajadoras; como responsables de las administraciones públicas, comprometiéndose a establecer o ampliar los servicios de salud mental; y como referentes de los medios de comunicación, sensibilizando y explicando qué más puede y debe hacerse para que la atención de la salud mental sea una realidad para todas las personas”.